No han sido Laporta, Deco, Yuste ni los jugadores. El principal enemigo de Xavi Hernández en el FC Barcelona, el que verdaderamente ha provocado su desgaste y sus ganas de volar en libertad, ha sido la prensa. En concreto, el foco mediático y las críticas semana tras semana, fuese cual fuese el devenir del equipo.
El de Terrassa siente que su trabajo no ha sido valorado, y así lo ha manifestado en la rueda de prensa de este martes. "Creo que no se ha valorado lo suficiente el trabajo, y esto genera un desgaste. Esta es mi sensación. No es por no aguantar la presión. Llegamos en uno de los momentos más difíciles de la historia del club", comentó ante los periodistas, en la comparecencia previa al Barça-Osasuna.
Críticas continuas de la prensa
El desgaste que se sufre en el banquillo del FC Barcelona, según Xavi, no es comparable al que podría sentirse en otros equipos. En un club como el azulgrana, se busca la excelencia constante. A pesar, incluso, de que la entidad atraviese uno de sus peores momentos a nivel económico y deportivo.
"Te hacen sentir que no vales a diario. Hablando con Pep ya me lo dijo. A Luis Enrique lo vi sufrir. Tenemos que reflexionar. Tenemos un problema con la exigencia de este cargo. Parece que te juegas la vida en cada momento. Por eso digo que es cruel, no se disfruta", reconoció el técnico egarense.
El obstáculo insalvable de Xavi
Tras haber dado muchas explicaciones en sus últimas dos ruedas de prensa, queda claro que Xavi tiene un enemigo declarado en el Barça: los medios de comunicación, a pesar de que su relación directa con ellos no haya sido mala. Xavi se marcha diciendo que está unido a la plantilla, que son una familia y van todos a una.
Se marcha asegurando, por activa y pasiva, que el presidente Laporta es lo mejor que le podía pasar al Barça, que está a muerte con él y muy agradecido por la oportunidad que le ha brindado; también ha hablado muy bien de Deco en las dos últimas comparecencias. Salvo por el incidente de la lista de convocados de Amberes, la relación entre ambos ha sido buena. En el discurso de Xavi todo es bueno... salvo las críticas externas y la presión mediática. Ese ha sido su mayor obstáculo.