Derrota frustrante del Barça en Montjuïc (3-5). De aquellas que hunden aún más al equipo en época de crisis de juego y resultados. Los de Xavi necesitaban ganar al Villarreal como agua de mayo, y no lo lograron pese a las dianas de Gundogan, Pedri y Bailly --en propia meta--. Gerard Moreno, Ilias, Guedes, Sorloth y Morales hicieron mella en la ilusión culé. Tras haber perdido dos títulos en enero, los blaugrana deben darlo todo en Liga y Champions. Pero siguen por mal camino. Y eso que la afición respondió con una de las mejores entradas: 46.229 espectadores. El resultado no acompañó, en una goleada con polémica arbitral incluida que deja a Xavi con la soga al cuello. Y al Barça, muy lejos de poder pelear por esta Liga.
Pese al desgaste de los últimos partidos, el conjunto azulgrana se mantuvo estable en los primeros minutos, sin encajar a las primeras de cambio como en partidos anteriores. Xavi dio bola a Héctor Fort y Lamine Yamal --dos de los mejores en Bilbao-- en una alineación con Koundé de lateral diestro, Christensen-Araujo en la zaga y Oriol Romeu --que volvía al once--, Gundogan y Frenkie en la sala de máquinas, con Joao Félix y Lewandowski acompañando al citado Lamine. Precisamente el joven extremo de La Masía generó la primera ocasión para los culés, tras desbordar en banda derecha y ofrecer a Gundo un pase que acabó en disparo repelido por la defensa.
Gerard Moreno se 'mofa' de la defensa culé
El susto para los de Xavi llegó poco antes de la media hora. Gerard Moreno recibió en el interior del área --con demasiada facilidad--, remató ajustado a puerta e Iñaki Peña no pudo hacer más que recoger el balón del fondo de las mallas. Esta vez, por suerte, el VAR acudió al rescate para comprobar que el gol se había dado en posición antirreglamentaria. Antes del descanso, otro disparo desviado de Lamine y tímidos acercamientos de un equipo, el blaugrana, al que le costó encontrar profundidad.
El Villarreal, sin hacer demasiados méritos para irse al descanso por delante, marcó en el minuto 41. Gol de Gerard Moreno al rematar, de primeras, el pase de la muerte de un Sorloth que hizo lo que quiso frente a Oriol Romeu. La pasividad de la defensa culé, lo peor del primer acto. Lo mejor, la actitud de una afición que animó sin cesar... Al menos hasta el pitido final de la primera parte.
Ilias marca... y Gundogan responde
Xavi reaccionó con un triple cambio para la segunda mitad. Cubarsí, Cancelo y Pedri entraron por Christensen, Héctor Fort y Oriol Romeu, a fin de dinamizar al equipo y buscar la remontada. Nada más reanudarse el juego, el Barça dispuso de una ocasión clara. El problema es que, pese a que Lamine y Gundo tuvieron opciones de disparo, prefirieron llegar hasta la cocina. A los groguets, sin embargo, les cayó un regalo del cielo. Error tremendo de Cancelo en un control, Ilias encaró la portería culé, regateó a Iñaki Peña y puso el 0-2 en el marcador para congelar Montjuïc. No lo celebró y pidió perdón a la afición, pero no era consuelo alguno. Un gol de mala fortuna par el Barça, tras el fallo de un futbolista que volvía a jugar tras varias semanas inactivo. A veces, todas las desgracias vienen juntas.
Una remontada rota por el gol de Guedes
El caso es que Xavi echó una ojeada al banquillo y dio entrada a Ferran Torres por Joao Félix. El de Foios, nada más entrar, probó fortuna con un disparo que atrapó el portero. Y dos minutos después, Gundogan anotó el 1-2 en un ataque iniciado por el tiburón. El barcelonismo volvió a creer en la remontada, con un Ferran que espoleó al público. La gente se vino arriba. Y el Barça, también.El de Foios, en todas partes, remató después --de forma defectuosa-- un pase de la muerte de Gundogan en el interior del área. El empate, no obstante, llegó unos minutos después. Pedri se encontró un balón muerto en el interior del área, disparó con fuerza y obtuvo la recompensa. 2-2 a falta de 25 minutos para el final, y todo por decidir en Montjuïc. Aún faltaba la traca final. Apenas unos minutos después del 2-2, el FC Barcelona confirmó la remontada.. aunque fuese de forma temporal.
Ronald Araujo forzó un remate en propia puerta de Eric Bailly, provocando el éxtasis en el Olímpic. 3-2, remontada en un cuarto de hora y Xavi, aliviado por momentos. Con el Barça por delante, el de Terrassa cambió a Lewandowski y dio entrada a un Vitor Roque que se estrenó al fin en Montjuïc, recibiendo una calurosa ovación. Lo que parecía un final feliz para el Barça se convirtió en decepción. Porque Guedes, que había salido hacía pocos minutos, volvió a establecer la igualada a falta de diez minutos para el final. Los culés ya no tuvieron respuesta, aunque hubo tiempo para la polémica.
El VAR y la mala defensa anulan al Barça
Al borde del descuento, Comesaña tocó claramente un balón con la mano en el área del Villarreal, y Munuera Montero pitó inicialmente penalti. Fue entonces cuando el VAR hizo de las suyas. Llamaron al colegiado, le obligaron a ver la jugada en el monitor y a rectificar. Penalti anulado, y ni siquiera córner --que era lo justo--. Balón directamente para el Villarreal tras la revisión, ante un Barça y una afición que ardieron contra los colegiados. "¡Así, así, así gana el Madrid!" se escuchó en las gradas, mientras que a pie de césped Xavi era muy claro: "Es una puta vergüenza", se le escapó. Y, en mitad de la desconexión y la frustración culés, aún hubo tiempo para dos goles más de Sorloth y Morales. 3-5, y a los culés se les escapa aún más esta Liga.