Aquello de que los jugadores que se marchan cedidos no vuelven al Barça, es algo que suele cumplirse con frecuencia desde hace años. Eso no quiere decir que algunos no se revaloricen. En el caso de Sergiño Dest, el joven carrilero está jugando a un altísimo nivel en el PSV Eindhoven. Un rendimiento que, en cualquier caso, probablemente no le permita regresar al Barça. Más bien lograr un traspaso.
Dest está siendo una pieza clave para Peter Bosz en un PSV clasificado para octavos de Champions con una jornada de antelación, y primero destacado en la Eredivisie. Normalmente en el lateral zurdo, el futbolista cedido por el Barça está aportando en defensa y en ataque, recuperando la confianza y su nivel del Ajax.
Futuro traspaso en el Barça
Tiene contrato con el FC Barcelona hasta 2025, y el pasado verano participó en la pretemporada del equipo de Xavi Hernández, realizó la gira norteamericana y en agosto se oficializó su salida rumbo a Holanda.
Si sigue a este nivel, es probable que el PSV pague los 10 millones de euros de opción de compra para quedarse al jugador en propiedad. O también para hacer negocio, en caso de poder traspasarle luego por una mayor cantidad.
Puede jugar contra los culés
Sea como sea, y a pesar de ser un jugador joven, talentoso y muy aprovechable, resulta complicado que Dest pueda volver a tener cabida en la plantilla del Barça. La política azulgrana ha sido la de reducir el máximo número de fichas en los últimos mercados, y la voluntad de la cúpula culé sería quitarse de encima su salario.
Para, de esta manera, seguir reduciendo masa salarial y oxigenando las cuentas. Dest, por cierto, no tiene cláusula de miedo en su contrato de cesión al PSV. Eso significa que puede enfrentarse al FC Barcelona, en caso de darse un hipotético cruce en los octavos de la UEFA Champions League 2023-24.