El FC Barcelona sufrió más que nunca para llevarse los tres puntos (2-1) contra un combativo Deportivo Alavés. Fue un encuentro tenso para los azulgranas, sobre todo por los esfuerzos defensivos del rival y por las diferentes disputas de balón. En este sentido, Pedri sufrió una acción desmedida por parte de Rubén Duarte y que pudo haber significado una tarjeta roja un poco después de la mitad de la segunda parte. Sin embargo, el árbitro perdonó la expulsión directa.
La jugada en cuestión fue una entrada a destiempo del defensor del Deportivo Alavés, que terminó pisando el tobillo derecho del centrocampista canario. La repetición fue bastante clara con respecto a la intensidad de la acción, dejando pocas dudas de que se trataba de una tarjeta roja directa. Pero Busquets Ferrer, el árbitro principal, solo amonestó con una amarilla. Tampoco el colegiado encargado del VAR, Ortíz Arias, avisó para que fueran a revisar el pisotón.
El barcelonismo se mostró bastante cabreado en redes sociales, en especial por la preocupación que generó el golpe que sufrió Pedri, que recordemos viene saliendo de una larga lesión. La buena noticia es que el joven futbolista pudo continuar el partido sin ningún tipo de problema, aunque está claro que el FC Barcelona se vio un poco perjudicado por ese tipo de detalles en la gestión del árbitro.