El Real Madrid se ha convertido en la bestia negra del Barça. En una pesadilla. La pasada fue una semana negra para el club azulgrana. Su frustración contrastó con la euforia madridista. En baloncesto y en fútbol, el Madrid ganó dos clásicos que se le complicaron de entrada y que acabó celebrando por todo lo alto.
El jueves, el Barça tuvo contra las cuerdas al Real Madrid en el WiZink Center, pero perdió su primer partido de la Euroliga por 65-64.
El equipo de Roger Grimau fue de más a menos. Llegó a ganar por 14 puntos (16-30), pero no pudo frenar a Deck, autor de 20 puntos. Los máximos anotadores del Barça fueron Willy Hernangómez (13 puntos), Vesely (12) y Abrines (11). Jabari Parker, en cambio, no sumó. Antes, el Madrid también había ganado al Barça en partidos de la Supercopa de España y de la Liga ACB.
El clásico de Montjuïc
Dos días después, Barça y Real Madrid se enfrentaron en Montjuïc. El clásico comenzó con el equipo de Xavi a tope y un gol de Gundogan que presagiaba una tarde feliz para los barcelonistas.
El Barcelona fue muy superior en los primeros 60 minutos y estrelló dos balones en el poste, en sendos remates de Fermín e Iñigo Martínez.
El penalti a Arujo
El Madrid, con Modric en el campo, reaccionó en la media hora final y ganó gracias a dos goles de Bellingham, por quien el club blanco pagó algo más de 100 millones de euros en verano.
El Barça, en ambas ocasiones, se sintió perjudicado por los arbitrajes. La acción más polémica fue el agarrón de Tchouameni a Araujo en la parte final de la primera parte que ignoró Gil Manzano.
En fútbol y en baloncesto, el Real Madrid manda en España y el Barça va a remolque, pero queda tiempo para revertir la situación actual.