El tiempo vuelve a echarse encima del FC Barcelona en el mercado de fichajes. La inyección de la cuarta palanca procedente del fondo alemán Libero Football Finance no llega, y el Barça necesita generar el Fair Play financiero suficiente para desatascar los últimos fichajes. El primero en aterrizar será Joao Cancelo, pendiente de los últimos flecos para sellar su cesión con opción de compra. En tanto, Joao Félix permanece a la espera. Su incorporación al conjunto azulgrana está supeditada a varias operaciones.
Este efecto dominó lo encabeza la posible salida de Ansu Fati. Precisamente, el 10 barcelonista y el atacante del Atlético de Madrid comparten agente: Jorge Mendes. El representante luso intentará cuadrar ambos traspasos sobre la bocina de la ventana veraniega. Aun así, Xavi Hernández no se ha mojado sobre la llegada del futbolista rojiblanco porque no es petición suya. Del mismo modo, tampoco prioriza la permanencia del jugador bisauguineano en Can Barça.
La cesión de Ansu
Principalmente, Ansu Fati tiene la llave de la llegada de Joao Félix. En función del club en el que recale el delantero de 21 años, la llegada del viejo anhelo de Joan Laporta se complicará más o menos. El Tottenham Hotspur es el equipo que ha pujado más por los servicios del atacante azulgrana, deseoso de salir de Barcelona para aumentar su protagonismo.
Sin embargo, algunas informaciones afirman que Ansu preferiría fichar por el Liverpool o el Chelsea, opciones todavía más complicadas. Y es que los reds precisarían de la marcha de Mohamed Salah con tal de activar la operación posteriormente. El Al-Ittihad de Karim Benzema estaría preparando una oferta, pero el conjunto entrenado por Jürgen Klopp se cierra en banda a una venta de su estrella egipcia.
Dos condiciones
No solo la cesión de Ansu es fundamental para la incorporación de Joao. Como club excedido, el Barça puede inscribir el 50% de cada salario que libera en la Liga. El del joven delantero oscila entre los 14 y los 16 millones de euros brutos, una cifra similar a los emolumentos del jugador luso. Sin embargo, la directiva de la entidad catalana solo podría utilizar 7-8 millones, correspondientes a la mitad de la ficha.
La segunda circunstancia que condiciona el fichaje de Joao Félix --en calidad de cedido-- es la inyección de 20 millones por parte de Libero Football Finance. La cúpula ejecutiva del FC Barcelona considera condición sine qua non dicho ingreso para asegurar las últimos refuerzos de mercado. En caso negativo, Laporta ya prepara un nuevo aval de 20 kilos para el viernes 1 de septiembre, fecha límite de la ventana de traspasos.