Ansu Fati sigue en venta. Lo ha estado siempre desde que terminó la pasada temporada. Xavi Hernández ya le ha expresado que no es un futbolista imprescindible para él y que podría tener menos protagonismo del deseado en el equipo. El futbolista, sin embargo, insiste en que quiere quedarse en el Barça y ha dado órdenes a su representante, Jorge Mendes, de que no busque un nuevo equipo. Pero el posible fichaje de Neymar podría ser definitivo para Ansu.
Laporta busca un golpe de efecto. Un fichaje mediático. El presidente del Barça ya negocia el posible regreso de Neymar, quien está loco por volver al equipo azulgrana. Xavi, de momento, frena una operación que no le convence porque entiende que el brasileño es un futbolista que va por libre y no es muy disciplinado.
Xavi, sin embargo, también fue claro con Ansu Fati. La pasada temporada, el delantero africano fue más suplente que titular.
El rendimiento de Ansu
Ansu Fati comenzó la pasada con muchas dudas, tras recuperarse de su segunda lesión muscular. Tenía menos velocidad y chispa. Y muchas dudas. Un año después, asegura que se encuentra mucho mejor. Con más confianza.
Ansu Fati festeja un gol anotado en la gira del Barça en Estados Unidos
La apuesta de Xavi por reforzar el centro del campo para tener más control de los partidos, sin embargo, perjudica a Ansu Fati. El técnico tiene claro que Lewandowski es intocable. Y Raphinha es quien tiene más opciones de ser el segundo atacante tras la marcha de Dembelé. Ferran Torres y Ansu parten como suplentes. Igual que Abde, pendiente de que el club confirme que se queda en el primer equipo.
Oferta de la Premier
El Barça, mientras, también ha comunicado a Mendes que aceptará la venta de Ansu Fati si recibe una buena oferta. Su traspaso al Wolverhampton no cuadró, pero algunas informaciones aseguran que el club ha recibido una oferta de la Premier que rondaría los 50 millones de euros.
El actual valor de mercado de Ansu Fati, curiosamente, es ahora de 35 millones de euros. Hace dos años era de 80. Entonces fue etiquetado como el relevo de Messi, una losa demasiado pesada para un jugador que se lesionó de gravedad la rodilla y padeció dos problemas musculares.