Si el verano pasado fue el de las palancas, el presente está siendo el de los recortes. El FC Barcelona, obligado por las urgencias económicas y la necesidad de ganar Fair Play financiero, ha potenciado la salida de algunos futbolistas a fin de generar ingresos y equilibrar las cuentas. El plan inicial de la dirección deportiva del Barça era ingresar unos 100 millones de euros en traspasos, y se preveía una gran venta --como la de Ansu Fati, Raphinha o Ferran Torres-- para llegar a dichas cifras.
Finalmente los acontecimientos han ido por otros derroteros, pero lo cierto es que el club va camino de cumplirlo con su voluntad. Una cifra que, junto a los recortes aplicados en todas las secciones y estamentos del club, ayudará a reducir el agujero económico de 220 millones de euros que arrastra el Barça en sus arcas.
Griezmann computa en este ejercicio
A día de hoy, el FC Barcelona acumula ya 47,9 millones de ingresos por traspasos. Nico González, Antoine Griezmann, Francisco Trincao y Franck Kessié han dejado dinero con sus respectivas salidas, aunque los tres primeros ya jugaron la temporada pasada en otros equipos.
El Atlético de Madrid y el Barça pactaron el traspaso definitivo de Antoine Griezmann por unos 20 millones de euros, a medio camino entre los 40 millones de opción de compra y la negativa de la directiva rojiblanca a pagar un solo euro. Con el pacto se evitó un litigio en los tribunales, y se llegó al acuerdo en octubre de 2022. El Principito no había disputado prácticamente ningún partido como titular en el inicio de campaña 2022-23 hasta la entente entre entidades. El dinero ingresado computa como venta de este mercado de fichajes estival.
Trincao y Nico, sin sitio en el Barça
Algo parecido sucede con Francisco Trincao. El Barça cedió al joven extremo al Sporting de Lisboa por tres millones de euros. Dicha cifra sí que consta en la ventana de traspasos de verano de 2022. Sin embargo, la opción de compra implicaba que al evitar el descenso matemáticamente, el conjunto luso abonaría siete millones. Las condiciones se cumplieron y, por lo tanto, ese dinero cuenta como venta enmarcada en este mercado de fichajes. Incluso el Barça se reserva un 50% de una futura venta por si el jugador acaba revalorizándose.
En cuanto a Nico González, Xavi lo ve demasiado verde para tener minutos actualmente en el Barça, por lo que adquirirá experiencia en el Oporto durante cinco temporadas. El Barça posee el derecho de recuperarlo hasta junio de 2025 por 30 millones de euros. De declinar esa opción, se habrían ingresado tan sólo los 8,4 millones este verano, más un 40% de una hipotética venta futura.
Dembelé, Dest y Lenglet, los que faltan
Faltan por concretarse tres ventas más, con las que el FC Barcelona se acercará --e incluso podría superar-- a los 100 millones planteados. Si todo sigue el curso previsto, Ousmane Dembelé pondrá rumbo al Paris Saint-Germain por entre 25 y 35 millones de euros, en función de lo que consiga rascar el Barça del club presidido por Al-Khelaifi. Por último, están los casos de Clément Lenglet y Sergiño Dest.
Estos dos últimos traspasos aún están en el aire, pero no es ningún secreto que Xavi no cuenta con ellos y que el Barça, sea al destino que sea, planea ingresar entre 10 y 15 millones por cada uno de ellos. Una premisa asequible, teniendo en cuenta no sólo el interés de varios clubes europeos en hacerse con sus servicios, sino también el auge de los equipos de Arabia Saudí. De momento, hasta que hagan las maletas podrían ser inscritos incluso en Liga junto al resto de sus compañeros.