Contratiempo meteorológico en el viaje del Barça a Las Vegas

No está siendo una gira de pretemporada tranquila para el FC Barcelona. Además de la gastroenteritis vírica que impidió a los culés jugar el primer partido ante la Juventus, del mal estado de los terrenos de juego y del polémico caso Dembelé, los de Xavi también están teniendo otros contratiempos. En este caso, meteorológicos.

Un cúmulo de contratiempos

La expedición del FC Barcelona ha sufrido nada menos que un retraso de más de cuatro horas y media en su vuelo de Dallas a Las Vegas. Una situación que ha provocado que ningún futbolista pudiese atender a los medios de comunicación en la llegada a Las Vegas, y que se suspendiese también la sesión de entrenamiento previa al compromiso frente al AC Milan en el Allegiant Stadium.

Un trasvase más para los planes previstos del FC Barcelona, que se está encontrando con una de cal y una de arena a lo largo de la gira. El horario inicial que estableció el club para aterrizar en Las Vegas ya había sido cambiado de antemano. El Barça pasó de volar de las once de la mañana a las cuatro de la tarde, hora de Dallas.

A su llegada al aeropuerto, no obstante, los blaugrana se encontraron con varios imprevistos. En primer lugar, que el avión que debía transportar a toda la expedición llegaba con retraso de Canadá. Después, una tormenta de arena en Las Vegas que provocó dos horas más de retraso acumulado entre todos los vuelos.

Fermín López, sonriente antes de coger el vuelo rumbo a Las Vegas / FCB

Dembelé ya está en Las Vegas

Un cúmulo de contratiempos que provocaron que el Barça llegase a Las Vegas sobre las nueve de la noche, hora local. En un principio, y aunque los jugadores se habían pasado tres horas en el avión esperando su salida de Dallas, se planteó la opción de que fuesen al estadio a realizar una sesión de estiramientos.

Finalmente dicha alternativa se descartó, porque la ropa y el resto del equipamiento iban a tardar demasiado en llegar. Una vez tomada la decisión, la expedición fue directamente al Palms Hotel, también la presencia de un Dembelé que sigue esperando a que Barça y PSG lleguen a un acuerdo para su traspaso.