Dicen que más vale prevenir que curar. Eso es lo que está haciendo el París Saint Germain ante una posible salida de su máxima estrella, Kylian Mbappé, al Real Madrid. El campeón francés ya ha perdido al mejor futbolista de la historia, Leo Messi, que comenzará una nueva etapa en Miami, y no quiere que la marcha de otro de sus cracks le pille por sorpresa.
En este sentido, el PSG ya perfila una importante renovación de su plantilla en todos los estamentos. Ayer presentaron a Luis Enrique como nuevo entrenador, pero también cuentan con nuevos jugadores. Skriniar y Marco Asensio ya han sido confirmados, y en los próximos días se espera el anuncio de otros fichajes como Kang-in Lee, Lucas Hernández y Manuel Ugarte.
Luis Enrique posa como nuevo entrenador del PSG
El adiós de Mbappé supondría la búsqueda de una nueva estrella francesa
Estas incorporaciones aportarán un salto de calidad a un PSG que tiene una obsesión con la Champions, aunque, si finalmente sale Mbappé, estos fichajes serían insuficientes para conseguir los objetivos de la temporada. Por ello, desde Doha, ciudad catarí donde habita el núcleo duro de la entidad, tienen un candidato claro para sustituir al atacante francés.
Ousmane Dembelé sería el elegido por la cúpula catarí. Su cláusula de 50 millones de euros hasta el 31 de julio es asequible para un jugador de la talla del extremo francés, cuyo salario aumentaría exponencialmente. Además, el nuevo técnico del conjunto parisino vería con muy buenos ojos su llegada.
Dembelé, en una acción contra el PSG | EFE
El Barça quiere blindarlo
El FC Barcelona quiere renovar a Ousmane cuanto antes. A sus 26 años, el internacional francés es uno de los jugadores más desequilibrantes del equipo azulgrana, y la dificultad por acceder al mercado dificultaría en exceso encontrar un sustituto de su nivel.
El PSG, por su parte, ya intentó hacerse con los servicios de Dembele el año pasado, pero al final terminó prolongando su contrato con el Barça. Pero Al-Khelaifi y su séquito no se rinden nunca en estos temas, ya le robaron a Neymar en 2017 y ahora están obcecados en hacer del mosquito la nueva perla francesa que sustituya a Mbappé.