De Limak a New Era Visionary Group pasando por Torrella y Libero: los socios menos fiables del Barça de Laporta

El Barça es protagonista dentro y fuera del terreno de juego. Por el buen juego del equipo de Hansi Flick, pero también por las empresas con las que hace acuerdos Joan Laporta. La última de ellas, New Era Visionary Group, propiedad de Ruslan Birladeanu, un ciudadano moldavo, que se encargará de montar la red 5G del futuro Camp Nou hasta 2030 junto a Orange.

El club azulgrana, en el comunicado oficial, aseguró que la firma era una "líder mundial en conectividad". La realidad es que la compañía nació el año pasado y aún no tenía clientes. New Era es la que, posteriormente, se comprometió a pagar 70 millones --de momento ha abonado 28-- para inscribir a Dani Olmo hasta final de temporada.

Una empresa creada hace un año

También es la que elaborará Barça Mobile, la compañía móvil del club que conectará a todos los fans del mundo. Será, realmente, el primer trabajo de este tipo que haga Birladeanu. También en la explotación de asientos Vip, que obtuvo con el gran pago ya citado.

Nueva sede de New Era Visionary Group Iberia, sociedad que ha pagado 28 millones por los palcos Vip del Camp Nou Gerard Boada CULEMANÍA

Fuentes de New Era aseguraron a Culemanía que lo importante era que Olmo estaba jugando y no quisieron hablar de los 42 millones que se deberán pagar en no mucho. Ahora ha cambiado de sede, pero cuando firmó con el Barça la firma de Emiratos Árabes obraba en un piso de coworking del barrio de Sant Andreu. Ahora está en la calle Bailèn.

Al frente del Camp Nou

Se asentó en España con un capital social de 3.000 euros. Por todo esto, al menos sobre el papel, parece no ofrecer fiabilidad. No es el primer acuerdo que no despierta confianza desde que Laporta volvió al Barça. Otro caso similar es el de Torrella Ingeniería.

Recreación de dos proyectos de Nikken Sekkei para el Camp Nou FOTOMONTAJE CULEMANÍA

En 2022, el club azulgrana apartó de la dirección de las obras del Camp Nou a la reputada Nikken Sekkei. La institución escogió a una empresa de Terrassa, Torrella Ingeniería, especializada en naves industriales, pero no en estadios de fútbol.

En su momento, este movimiento llamó mucho la atención por la magnitud de una obra como la del Espai Barça, destinada a marcar el futuro del club y de Catalunya.

Dudas con Limak

Los plazos de las obras, de momento, no se están cumpliendo. La vuelta al Camp Nou, tal y como aseguró la directiva, estaba prevista para el 125 aniversario del club, el pasado noviembre. Y ahí tiene parte de responsabilidad Limak, la constructora escogida para llevar a cabo la obra como tal.

El logo de Limak brilla en plenas obras del Camp Nou Víctor Malo CULEMANIA

Laporta apostó por fiarse de la velocidad que prometía la empresa otomana, quien, a su vez, se ofreció a pagar un millón de euros por cada día de retraso que el club no está recibiendo. Considera que se deben a aspectos imponderables. Se optó por Limak en vez de por el talento nacional. Había UTEs interesadas en hacerse con la obra, pero la firma turca ofreció las mejores condiciones económicas: mantenía el presupuesto de 900 millones.

Ni Ferrovial, ni Acciona, ni Vinci mantuvieron este precio. De momento, con el retraso y las dudas puestas sobre el retorno a principios de la próxima semana, la elección de Limak ofrece muchas dudas.

Los impagos de Libero

Otro negocio que perjudicó mucho al club fue el de Barça Studios. Uno de los socios en cuestión que causó infinitos problemas fue Libero. En 2023, acordaron pagar 40 millones por la filial digital del club. La compañía alemana, el pasado febrero, se desplomó en la bolsa de Frankfurt y fue Aramark la que sofocó una parte de su deuda, con un pago de 25 millones. Una parte fue a parar a Jaume Roures.

La caída de Libero Football Finance en la bolsa de Frankfurt REDES

En líneas generales, los 408 millones en los que se tasó Barça Studios han acabado siendo un problema. El club ha terminado reduciéndolo todo a pérdidas en los presupuestos. Por culpa de los impagos, la entidad se vio obligado a vender futbolistas o echarlos --véase el caso de Ilkay Gundogan-- para generar Fair Play y operar en el mercado.

Escándalo con ISL

También se habló de un presunto conflicto de intereses con la empresa ISL. Joan Laporta aceptó un préstamo en 2021 de 350.000 euros para hacer frente al coste de los intereses del aval que firmó la junta para poder presidir el Barça.

Joan Laporta hace el símbolo de la victoria para celebrar su triunfo electoral en 2021 (antes de conseguir los avales) EFE

Fue un deseo personal de Laporta y compañía el de gobernar la institución culé. Pero, luego, en 2022, la empresa de Alex Isern organizó la pretemporada por Estados Unidos. También colabora con las Barça Academy del país.

Con motivo de la pretemporada, también hubo polémica por un amistoso que se iba a jugar en Israel. Comtec Group estaba organizando un partido entre Villarreal y Barça, pero Laporta estaba haciendo otra negociación con Moshe Hogeg para celebrar otro en el país judío ante el Beitar. Todo cayó por la guerra con Palestina. Así es como se diluyó la idea, una de las muchas que levantan sospechas alrededor del presidente.