La historia entre el FC Barcelona y Nike todavía tiene muchas páginas por escribir. Tras meses de intensas negociaciones, las dos partes van a ampliar su relación comercial --como mínimo-- hasta 2038. El acuerdo es el equivalente a un salvavidas para la junta de Joan Laporta, pero también lo es para una empresa que tampoco vive sus mejores momentos en el área financiera.
El Barça no es el único que atraviesa una etapa turbulenta. Nike todavía es una marca de prestigio, pero su imagen a lo largo del presente año ha quedado muy golpeada por la caída en la bolsa, las graves previsiones en ingresos y su menor presencia en la élite futbolística. En ese contexto aparece el nuevo acuerdo con el FC Barcelona como agua en el desierto para revertir esa situación.
Alarmas en Nike
A mediados de año, la compañía con sede en Estados Unidos tuvo una caída en la bolsa del 20%, el peor registro en toda su historia. El motivo principal de ese golpe en el parqué bursátil fue la disminución de las ventas en el primer semestre de 2024, además del pesimismo de la dirigencia de Nike en enderezar la situación en el corto plazo.
Esa delicada situación dio a pie a la destitución de John Donahoe, que fue consejero delegado de la empresa norteamericana. Nike ha apostado por un giro radical para trazar una hoja de ruta que permita recuperar la rentabilidad. De momento es un escenario complejo, debido a que esperan una caída de los ingresos de entre el 8% y el 10% para el próximo trimestre.
Cambio de liderazgo
El encargado de frenar la sangría económica de la compañía es Elliott Hill, que vuelve a ocupar el puesto de CEO tras los malos resultados del último año. Lo más crítico que ahora debe afrontar la cúpula de Nike son los problemas de inventario y la presencia de nuevos competidores en el mercado como Hoka y On Running.
El empresario de 60 años se encuentra ante un reto gigantesco para renovar la estrategia de la marca de ropa deportiva, aunque lo hace con la noticia de la alianza reforzada con un gigante del fútbol como el FC Barcelona, que implica estar en lo más alto del fútbol continental.
Se aferran al Barça
El acuerdo con el Barça también supone un alivio para Nike por su lucha con Adidas y Puma. Las tres marcas tienen una disputa por la mayor notoriedad en el balompié internacional. La empresa norteamericana tiene al FC Barcelona como su principal referencia, pero en los últimos años han perdido a varios aliados de cierta relevancia.
Los casos más relevantes son los de la Conmebol y la Premier League, quienes decidieron romper con Nike sus respectivos acuerdos comerciales para empezar una nueva era con Puma. Otros clubes como el RB Leipzig y el Galatasaray también apostaron por abandonar a la citada compañía y empezar nuevos patrocinios para renovar su marca en el panorama internacional.
Nike mantiene su prestigio en el fútbol al contar con el FC Barcelona, lo que todavía permite ejercer una batalla de poder de marcas con Adidas que tiene a otros grandes clubes como Real Madrid y Manchester United; mientras que Puma saca pecho por el acuerdo de esponsorización con el Manchester City, vigente campeón de la Premier League.
Dinero a la vista
El FC Barcelona tiene sus ventajas con el nuevo acuerdo. No solo por la posibilidad de cobrar hasta un total de 1.700 millones de euros en 14 años de contrato, sino también por las novedosas condiciones que están estipuladas en la renovación con el Nike. En este sentido, el área comercial culé ahora cuenta con mayor libertad de gestión.
Tal y como hemos explicado en Culemanía, una de las ventajas es que ahora el club tendrá vía libre para la explotación del e-commerce internacional y la marca blanca sin restricciones. Dos acciones que pueden incrementar los ingresos de BLM (Barça Licensing & Merchandising) considerablemente, sobre todo por el escenario de abrir una tienda oficial fuera de España.
Proyectos similares
A pesar de sus diferencias, Barça y Nike demuestran que tienen más similitudes de las que parecen. Son dos grandes en sus respectivos sectores, pero que por diferentes motivos están encarando un momento complejo de sus historias. Juntos esperan dar vuelta a la situación y gozar de una relación que permita posicionar sus marcas en lo más alto del deporte mundial.