El fuera de juego semiautomático en la Liga: 12 cámaras, 29 puntos de movimiento y 5 millones de euros

El polémico fuera de juego señalado a Robert Lewandowski en Anoeta ha abierto el debate en el mundo del fútbol. ¿La tecnología también se equivoca? Hasta los jugadores del FC Barcelona dudaban sobre la posición del pie en las imágenes mostradas por la sala de videoarbitraje (VAR) durante el partido contra la Real Sociedad. Esta innovación denominada SAOT (Semi-Auomated Offside Tech) tampoco es infalible.

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) introdujo el fuera de juego semiautomático para la temporada 2024-25 en la Liga. El ente federativo extenderá la aplicación a Segunda División para el curso 25-26. El Barça de Hansi Flick había sabido sacar provecho del SAOT, de precisión milimétrica, con la trampa del fuera de juego. Esta tecnología consta de 10 y 12 cámaras, dependiendo del partido, y cuesta unos 5 millones de euros.

Innovación reciente

Sin embargo, contra la Real Sociedad, al conjunto azulgrana se le volvió en su contra por milímetros. Es la excepción que confirma la regla, pues el fuera de juego semiautomático ha venido para quedarse. La FIFA empezó a probar dicha técnica en 2021, en competiciones como la Copa África y el Mundial de Clubes de aquel año.

Tras un resultado convincente de los testeos, el SAOT se implementó en el Mundial de Qatar 2022 y, posteriormente, en la Supercopa de Europa 2022. Una vez superadas las pruebas de fuego, la UEFA aplicó el fuera de juego automático en la Champions League 2022-23. La incursión en España tuvo lugar para la Supercopa de 2023 y 2024, en Arabia Saudí.

Incursión en España

Finalmente, en diciembre de 2023, la RFEF adjudicó el fuera de juego a Hawk Eye Innovations, filial de Sony y la única empresa con licencia de la UEFA y la FIFA para desarrollar la tecnología SAOT. De esto último se encarga su marca Skeletrack, con experiencia en más de 32.000 partidos de fútbol y otros deportes como basket, béisbol, fútbol americano y hockey sobre hielo.

El organismo estatal español, ahora en pleno proceso electoral, aprobó la licitación en cuestión para el tramo 2024-2028. En tanto, concedió la gestión del VAR a Mediapro para el mismo plazo.

Tecnología punta

Tras una introducción cronológica, es menester explicar el funcionamiento de esta herramienta. El sistema de fuera de juego carbura mediante la instalación de 10 a 12 cámaras en las cubiertas de los estadios, independientes de las encargadas de las retransmisiones. Todas ellas proporcionan hasta 50 tomas por segundo de cada jugador en el campo.

A través del sistema Skeletrack, se monitorizan 29 puntos corporales --con los que el reglamento permite marcar gol-- de cada jugador para determinar la posición exacta del futbolista. La tecnología limb-tracking --detector de extremidades-- recrea imágenes 3D. Por si esto fuera poco, el balón contiene un sensor de unidad de medida inercial (IMU) instalado con el que se envían 500 señales por segundo.

¿Cómo funciona?

Algunos se cuestionarán por qué un sistema tan avanzado y automatizado va precedido por el prefijo 'semi'. Resulta que los árbitros encargados de la sala VOR tienen la última palabra. Si se detecta que el futbolista recibe el balón adelantado, el sistema envía un aviso a los colegiados de vídeo, acompañado de una imagen de la jugada con las líneas trazadas.

Los árbitros deben ratificar que se trata del frame exacto en el que el pasador entra en contacto con el balón, o bien retroceder o avanzar el fotograma. El nuevo método agiliza el proceso de comprobación de los 70 segundos aproximados que se tardaba manualmente hasta los 25 segundos con el uso de la tecnología SAOT.

Anteriormente, los árbitros del VAR debían seleccionar la imagen con el punto de golpeo exacto y tirar las líneas manualmente. Por lo tanto, el error humano era más habitual. Con la recopilación de datos pormenorizada, la posibilidad de fallo se minimiza. En el caso excepcional de Lewandowski, los espectadores se quedarán con la duda.