El FC Barcelona trabaja a marchas forzadas en la reforma del Camp Nou para volver antes de final de año. Las obras del Espai Barça todavía se prolongarán hasta 2026. En el estadio todavía restarán por construirse la tercera grada y la cubierta. A dos meses y medio de concluir 2024, el club presidido por Joan Laporta insiste en que se trabaja para regresar antes del 31 de diciembre. No obstante, cada vez surgen más complicaciones logísticas que disparan el escepticismo sobre el calendario.
Uno de esos obstáculos lo ha podido constatar Culemanía en los aledaños del recinto. Los operarios de Limak Construction --y sus empresas subcontratadas-- deberán cerrar el enorme agujero que abrieron antaño para poder realizar obras subterráneas como el parking, la nueva botiga, soterrada como los vestuarios, el área hospitality y el nuevo Museo. En estos momentos, el orificio impide el acceso a los aproximadamente 64.000 culés que acudirán a ver los partidos en 2025. Además, los obreros tendrán que instalar la iluminación y servicios como la venta de food & beverage y los lavabos.
Baile de fechas
Pese a las voces escépticas incluso dentro mismo del club, la vicepresidenta institucional, Elena Fort mantuvo en la última rueda de prensa informativa el plazo de diciembre de 2024: "El club está trabajando para tener el Camp Nou listo para que el Barça pueda volver antes de final de año". No así el vicepresidente del área social, Antonio Escudero, pesimista en Catalunya Ràdio: "Creo que el estadio estará a punto para marzo. Antes de acabar el año es inviable".
Los camiones ubicados en los aledaños del Camp Nou junto al enorme agujero para las obras subterráneas
Aun así, la institución barcelonista insiste a Culemanía que existe información privilegiada sobre el avance de las obras que desconoce incluso Escudero. En tanto, ya se han fijado los precios de los abonos para la segunda mitad de la temporada en el Camp Nou. Los importes serán invariables independientemente de la fecha exacta de regreso. El interior del estadio empieza a teñirse de azulgrana con la instalación de los primeros asientos en las gradas inferiores.
Complicaciones logísticas
Ya no se trata solamente de adecuar el estadio para la celebración de partidos, sino de compaginar la disputa de uno o incluso dos encuentros por semana con las obras. En este sentido, el responsable de Operaciones del Espai Barça, Joan Sentelles, advirtió en la rueda de prensa en el Auditori 1899 sobre la desaceleración de la remodelación: "Con el regreso al Camp Nou, el ritmo de las obras se ralentizará un 25%, aproximadamente".
En primer lugar, los trabajadores tendrán que habilitar los accesos pertinentes y retirar las grúas y la maquinaria pesada. Ese proceso de quita y pon, condicionado por la convivencia con eventos deportivos, repercutirá negativamente sobre el deadline de agosto de 2025. Para entonces, tendría que haberse construido la estructura de la tercera gradería con un 90% de capacidad en todo el estadio. Además, tendrá que haberse colocado la cubierta semiabierta de 48.000 metros cuadrados.
Acelerón (contra el vecindario)
Para superar todos los obstáculos planteados, las obras han alcanzado la velocidad de crucero, gracias al último acuerdo del club azulgrana con el Ayuntamiento de Barcelona. El consistorio dio luz verde a mediados de septiembre para extender un horario que comprendía de 08.00 a 22.00 de lunes a viernes a las 24 horas del día. No obstante, solo podrán beneficiarse de esta medida los trabajos silenciosos en el interior del estadio. Los operarios en el exterior mantendrán la misma rutina. Aun así, el pacto ha desatado una oleada de quejos de los vecinos de Les Corts.
Las numerosas grúas que están presentes en las obras del nuevo Camp Nou
Los operarios de Limak colocan las butacas del nuevo Camp Nou
Y todavía querría dar un empujón mayor el FC Barcelona con más mano de obra, pero las trabas burocráticas en España dificultan la contratación de personal cualificado. Especialmente, de aquellos trabajadores procedentes del extranjero. Hasta la fecha, se han firmado más de 5.700 contratos laborales y más de 180 subcontratas, pero la cúpula directiva planea incrementar todavía más el número de trabajadores para la edificación de la tercera gradería.