Enric Masip, asesor de Joan Laporta y miembro de la comisión deportiva del FC Barcelona, ha confirmado que cierra oficialmente su cuenta de Twitter tras ser acusado de "racista" por la difusión de los polémicos mensajes contra la inmigración ilegal y la violencia machista. El exjugador de balonmano ha argumentado que su decisión responde especialmente por exponer al presidente del club azulgrana a "una situación incómoda".
Ante el revuelo generado en las redes sociales, Masip decidió eliminar los retuits que había realizado a los mensajes de diferentes usuarios que culparon a la inmigración de la violencia en España, además de destacar las elecciones francesas que ganó el partido de la ultraderecha. Tras borrar esa actividad, el asesor de Laporta compartió un comunicado en el que explicaba los motivos para desaparecer de la plataforma de Twitter.
El comunicado de Masip
"Ayer se produjo cierto alboroto en las redes sociales como consecuencias de la actividad en Twitter de mi cuenta. Debido a mi cargo en el FC Barcelona, y a mi recorrido como jugador en la entidad que quiero, quiero transmitir a la opinión pública que la libertad de expresión a veces sí puede entrar en conflicto con el rol que uno tiene asignado en el mundo laboral.
Como consecuencia del revuelo vivido y que los mensajes que he insertado en mi muro han podido causar malestar, especialmente, porque han puesto al presidente Laporta y al FC Barcelona en una situación incómoda que nunca hubiera querido que ocurriera, envío este mensaje para anunciar que cierro mi cuenta en X (anteriormente conocida como Twitter)".
Los usuarios piden su dimisión
Las explicaciones de Masip no sirvieron para minimizar el cabreo de los aficionados del Barça. Muchos usuarios respondieron a su comunicado pidiendo que dimitiera del club azulgrana. "En Can Barça no queremos gente como tú", "esto no es suficiente", "dimite parásito" y "fuera del Barça, rata fascista", son algunos de los mensajes que se pueden leer en la plataforma de Twitter.
La indignación de una buena parte del barcelonismo supone una enorme presión para Joan Laporta, sobre todo porque varios usuarios han etiquetado al perfil oficial del dirigente para hacer llegar sus quejas. De momento, reina el silencio en las oficinas del FC Barcelona.