La guerra de los agentes contra la FIFA sigue sumando más capítulos con el pasar de los meses. Ambas partes están confrontadas a partir de los intentos del organismo que preside Gianni Infantino para controlar el accionar de los representantes en el sector futbolístico, especialmente en el delicado asunto de las comisiones y la participación en los fichajes. Esa normativa que se está cocinando desde 2019, es el motivo que ha llevado la batalla a una escala judicial.
En el fútbol español, a través de la Asociación Española de Agentes de Futbolistas (AEAF), han movido ficha para frenar la presencia de los cambios normativos que ha introducido la FIFA. El año pasado, los representantes españoles lograron obtener medidas cautelares con respecto a la aplicación de la nueva reglamentación, al menos hasta que exista una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que es la última escala que definirá la batalla entre las dos partes.
Si bien la AEAF ha conseguido aplazar la presencia de la normativa del organismo regulador del fútbol internacional en España --el próximo mercado de verano tendrá las mismas condiciones en las comisiones--, lo cierto es que el TJUE puede tener la última palabra en dicha disputa. Es una sentencia que marca por completo el devenir de la representación en el panorama nacional, lo que ha obligado a los agentes a considerar otras estrategias para evadir las reglas de la FIFA.
El plan de los agentes españoles
Culemanía pudo contactar con Pedro Bravo, presidente de la AEAF, para conocer la situación de los representantes nacionales y su lucha judicial contra la FIFA. En este sentido, explicó a este medio que "el único miedo que puede haber es que el TJUE diga que el reglamento es válido y se debe cumplir, aunque sí eso lo hicieran tenemos una solución y es hacernos agentes de un país que no forma parte de la comunidad europea". En la explicación, el ejemplo citado fue el caso de Reino Unido.
La línea de los agentes españoles es encontrar la fórmula que les permita seguir trabajando al margen de la normativa de la FIFA. "Nosotros tenemos otras soluciones, que es irnos de la FIFA y de la RFEF, y constituirnos en una asociación de representantes con una cuota de autonómos y darnos de alta en impuesto de actividades económicas como asesores de futbolistas. No los necesitamos", expresó Pedro Bravo.
Desde su perspectiva hay confianza porque considera que en España el reglamento "incumple con la normativa legal", lo que ha permitido ganar hasta en dos ocasiones a la FIFA y la RFEF en la batalla por las medidas cautelares que han frenado el funcionamiento de la normativa en el fútbol nacional. El dirigente de la AEAF también ha reconocido que "los abogados de la Federación no están de acuerdo con el reglamento", aunque mantienen una postura contraria a los agentes para "no entrar en conflicto con la FIFA".
Nuevas reglas para los agentes
La AEAF ha puesto sobre la mesa algunos de los puntos en los que están en desacuerdo del cambio de reglamentación de la FIFA. En este sentido, Pedro Bravo comentó que "nosotros creemos que en España que el examen no cumple con la legalidad, porque no se puede hacer con carácter retroactivo". Además de estar en contra del tope en las comisiones, porque "es la base de la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia".
De igual forma, sostiene que otro de los puntos controversiales es la necesidad de compartir información relacionada a los honorarios y el dinero que obtienen los respectivos agentes. "¿Por qué no publican ellos lo que ganan? Eso no está permitido", alegó Bravo, que además expuso que "la RFEF no va a publicar los salarios que ganamos, porque no está permitido en el marco legal".