El FC Barcelona es un club propiedad de sus socios. Especialmente democrático. Es misión del presidente Joan Laporta y su junta directiva escuchar las peticiones de los miembros de la entidad, que se preocupan por la situación económica, deportiva y social que condiciona la actividad del Barça. La cúpula de la institución ha estado dos años sin dar señales, tras la propuesta de reforma estatutaria que un colectivo de socios presentó formalmente durante una reunión conjunta.
El objetivo principal es evitar la transformación del club en una sociedad anónima, un fenómeno que amenaza al club debido a la crisis financiera y la elevada deuda. Para acorazar el dominio del Barça, hace falta reformar los estatutos. Elena Fort lidera esta modificación, promovida por grupos como Seguiment FCB, El Senyor Ramón, Un Crit Valent y Dignitat Blaugrana. Precisamente esta última agrupación ha mostrado su descontento con la junta en redes sociales.
Esperan una respuesta
¿Pero qué es Dignitat Blaugrana? "Un grupo de barcelonistas que viendo la deriva que está teniendo en club en los últimos tiempos, queremos alertar del peligro de que no se controle las acciones que se están haciendo desde la actual junta directiva", según explican en su propia página web.
"Esta preocupación no va más allá de esta denuncia, nunca existe como objetivo de estas acciones ningún tipo de electoralismo ni aprovechamiento del momento y la situación actual del club", puntualizan. Con esta misión, Dignitat Blaugrana, hace dos años, se puso en contacto con el Barça para revisar los estatutos.
87 propuestas
En concreto, el 8 de junio de 2022, mediante un escrito de 20 páginas con 87 propuestas diferentes. El blindaje del modelo de gestión es solo una de las demandas dentro de la larga lista de peticiones que envió la congregación de socios al club. Dignitat Blaugrana reclama una respuesta por parte de la junta directiva del Barça.
El colectivo de socios, hasta el momento, no ha recibido ninguna contestación convincente. Tal y como explican ellos mismos, aún no saben en qué punto se encuentra la revisión de los estatutos solicitada. El club se dirigió a ellos hace dos meses, afirmando que "estaban trabajando en el tema". Sin embargo, cabe destacar que la institución que preside Joan Laporta ha dado un primer paso. El máximo dirigente blindará el modelo de propiedad, a petición los citados socios.
Las propuestas más destacadas
Además de prohibir la conversión en una Sociedad Anónima, Dignitat Blaugrana pide, en favor de la igualdad, que "las personas de un determinado sexo no pueden superar el 60% de cuota en la junta directiva del club", con la intención de que se modifique el artículo 30 de los estatutos sobre la naturaleza y la función de la misma junta.
Otra revisión que demandan desde el grupo es, de cara a las próximas elecciones, que un posible precandidato tenga el apoyo de varios socios. Además, para reforzar la integridad del club, piden la creación de un nuevo capítulo dedicado a los trabajadores del Barça, para que se seleccionen "siempre en base a méritos objetivos (todas las contrataciones deben basarse en criterios objetivos y transparentes), y contemplando que ser socio/socia del Club es un mérito que en caso de igualdad de los candidatos, provoca la contratación del socio".
Club familiar
La última propuesta mencionada puede responder a la contratación de conocidos o familiares por parte de gente que ya está dentro del club. El mismo presidente Laporta ha afirmado que su Barça es una entidad familiar. Dignitat Blaugrana no quiere evitar el ingreso de parientes, pero pide una revisión de los posibles conflictos de intereses.
La reclamación se centra en el artículo 32.2 de los actuales estatutos del Barça. En consecuencia, Dignitat Blaugrana señala que "los directivos no pueden estar vinculados al Club, ni por contrato laboral, ni por contrato mercantil (añadir), sia directamente sia a través de una Sociedad participada por el directivo/a. Hay que extender el alcance de la prohibición".
"Que la junta se manifieste"
El grupo de socios, asimismo, pide una revisión de los estatutos en materia de accesibilidad, para personas discapacitadas, se muestra favorable a las asambleas híbridas, y defiende que sean compromisarios aquellos que lo deseen o los que reciban más apoyo, en favor de la participación.
La paciencia de Dignitat Blaugrana se agota. Las medidas parecen lógicas y razonables. La espera de dos años está empezando a hacer mella. "Son muchas las cosas que cambiar y regular. Por eso pedimos públicamente a la junta directiva del club que manifieste cuál es la razón de esta demora de 2 años, cuándo abordarán la revisión y cómo se tratarán las aportaciones hechas por los socios y socias", sentencian desde la agrupación.