El Barça es un club imprevisible. Como su presidente, Joan Laporta. Lo que un día es blanco, al siguiente es negro. El mismo día que el máximo dirigente anunció la continuidad de Xavi Hernández, unas horas antes se filtraba que el técnico sería despedido. Con la reforma del Camp Nou pasa lo mismo. Un día presume de que el nuevo estadio tendrá un videomarcador de 360 grados y otro lo descarta y se presenta una recreación virtual con tres marcadores que seducen muy poco a los barcelonistas.
La transformación del Camp Nou avanza lentamente y muchas son las imágenes que se han presentado a los socios y aficionados. Imágenes distintas que evolucionan según el día. En 2023, el club, por ejemplo, colgó en su página web una imagen del futuro estadio con un videomarcador espectacular. Meses después, Elena Fort, vicepresidenta institucional, descartó su instalación.
El tema económico
"Los aficionados se despistan con estos marcadores, que no son rentables económicamente para el club", argumentó Fort, a quien le tocó el marrón de justificar una decisión impopular de Laporta.
El Barça parece que se conformará con un marcador de segunda categoría. Curiosamente, el Santiago Bernabéu ya ha estrenado su espectacular videomarcador de 360 grados. En el palco pudo verse a Laporta conversando del mismo con Florentino Pérez, presidente del Real Madrid.
Cambios en el Bernabéu
Florentino Pérez ha transformado también el Bernabéu. Antes de la actual reforma, el presidente del Real Madrid ya había invertido unos 180 millones en mejoras. El Camp Nou, en cambio, solo había realizado obras menores. En 2021, Laporta aseguró que estaba en muy mal estado, con casi 1.000 patologías.
Ahora, Laporta asegura que "el Camp Nou volverá a ser el mejor campo del mundo". Un campo con capacidad para 104.600 espectadores, con todos los asientos cubiertos, pero un marcador que no seduce nada a los barcelonistas.