Sandro Rosell rompe el silencio tras saber que un topo de Villarejo en el FBI le investigó

El expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, pasó 22 meses encerrado en prisión preventiva. Salió tras ser declarado inocente en el juicio del caso Rosell, enmarcado en la Operación Cataluña. El antiguo máximo dirigente del Barça se vio implicado por culpa de una investigación del FBI. El excomisarió José Manuel Villarejo logró tener a una persona de confianza dentro del cuerpo de investigación de los Estados Unidos, según ha desvelado Rac1.

El topo es José María Clemente Marcet, un economista catalán, que llegó a la agencia por recomendación del mismo Villarejo. La misma fuente ha podido acceder a muchos correos que demuestran el vínculo entre ambos y la recomendación de Villarejo para que Marcet se incorporase a los confidentes del FBI.

¿Cómo se relaciona a Rosell?

El excomisario le dio indicaciones a Clemente Marcet para contaminar en la agencia americana y actuar según los intereses de Villarejo. Fue el FBI quien puso sobre la mesa el nombre de Rosell, por unos presuntos sobornos en la FIFA con lo que Sandro no tenía nada que ver. Por este motivo, en su momento, la justicia española inició un proceso contra el antiguo mandatario del Barça.

El excomisario José Manuel Villarejo Cedida

El mismo Sandro Rosell ha acudido a los micrófonos de Rac1 para valorar los hechos. "Estoy muy indignado, pero no pararé, iré hasta el final", ha dicho el expresidente, realmente mosqueado. Aunque Rosell se ha mostrado decepcionado con el funcionamiento de los tribunales en el país. "Al salir de aquí presentaré una querella. Una de las que puse lleva dos años para que decidan si la admiten a trámite. Lo compararía con otros casos, pero prefiero no decir nada", ha afirmado.

Sospechas

"Tanto mis abogados como yo nos lo olíamos porque cuando no había aparecido Villarejo en todo esto, durante el juicio pedimos que viniera a declarar Marc Varry (agente del FBI), el testigo no apareció. Se reclamó a la embajada su presencia y no vino. Y no pasó nada aunque nosotros sabíamos que había intervenido en nuestro caso y había intoxicado al FBI", ha argumentado Rosell.

"Le puse una querella a la juez Carmen Lamela por prevaricadora y corrupta porque durante la instrucción sólo nos dio 2.000 de los 5.000 folios que había en la causa. Justo cuando ella dejó la instrucción nos entregaron los 3.000 restantes y allí estaba la comisión rogatoria de Estados Unidos por la que empezó nuestro proceso y en la que sólo se pedía una información que no tenía nada que ver con el caso por el que nos estaban acusando", ha añadido el expresidente.

Pero "cuando acusas a una juez del Supremo la juzgan cinco compañeros jueces del Supremo y estos me respondieron que no la encausaban alegando que la jueza se equivocó conmigo porque tenía mucho trabajo en ese momento y por esa carga de trabajo cometió un error", ha indicado Sandro en el estudio de Rac1.

... no pudiéramos decir 'Visca Catalunya'

"Lo hemos hablado muchas veces con Artur Mas y Xavier Trias. Decidieron coger a las tres personas con más altavoz: el presidente de la Generalitat, el alcalde de Barcelona y el presidente del Barça. Fueron a por nosotros para taparnos la boca y que no pudiéramos decir 'Visca Catalunya' o poner las cuatro barras en la camiseta del Barça, cosas que creíamos que eran buenas para Catalunya", ha sentenciado Rosell.

Sandro Rosell, en una imagen de archivo / EFE

Finalmente, el expresidente del Barça ha mencionado que Villarejo solo es un empleado al que le mandan, que está "en la parte más baja de la cadena". De una conversación con un conocido, Rosell extrajo una conclusión. "Entonces me dijo que cómo podía ser que en Italia tengan la mafia calabresa o la siciliana y que en España no esté la mafia extremeña o la catalana. Me dijo que era porque en España la mafia está dentro del estado y no fuera", ha concluido un Sandro Rosell indignado.