El FC Barcelona sólo tiene 204 millones de euros autorizados para gastar en todas sus secciones deportivas. Es la cifra que ha publicado la Liga semanas después del cierre del mercado de invierno. Al comienzo de temporada, la entidad presidida por Joan Laporta tenía 270 milones de límite salarial. Por tanto, esto conlleva una reducción de casi 70 millones que la institución puede gastarse en su plantilla. Hace un año y medio, en verano de 2022, el límite ascendía a 656 millones gracias a la activación de las palancas.
La rebaja actual tiene un sólo significado. El Barça ha gastado más dinero del que ha ingresado desde aquella fecha, además de mantener los mismos costes salariales, ya que no se ha producido la salida de ningún futbolista. Tampoco ninguna renovación por más años, como la que tiene encima de la mesa Frenkie de Jong para ajustar su ficha, la más alta de toda la plantilla este año.
Una plantilla muy cara
El coste del primer equipo de fútbol lleva años siendo demasiado elevado. En la temporada 2021-2022, el gasto deportivo (salario más amortizaciones) era de 518 millones de euros. El verano anterior a aquella temporada se redujo en 99 millones de euros. Se hicieron los deberes.
Aquel año, según informó la Liga, el límite salarial de la entidad azulgrana después del mercado de inviero era de -144 millones de euros. Las incorporaciones que se realizaron fueron, prácticamente, todas sin pagar una cantidad por traspaso: Depay, Agüero, Éric García, Luuk de Jong y Yusuf Demir. El club también contrató a otros jugadores libres en el siguiente mercado de invierno, Adama Traoré, Aubameyang o Dani Alves, y afrontó el fichaje de Ferran Torres por 55 millones en fijos más 10 en variables.
Además, tuvo que indemnizar a Ronald Koeman por despido y fichar a Xavi Hernández como sustituto. El club infló las pérdidas el verano de 2021. De esta manera, al año siguiente, podía registrar más beneficios. Esa fue la estrategia que siguió la actual junta al mando de la entidad, que sumada a la venta de activos en forma de palancas permitió multiplicar de forma significativa el límite salarial.
El año de las famosas palancas
Con la llegada del técnico egarense a mitad de temporada, el presidente del Barça y la directiva dejaron la política de recortes atrás y lo apostaron todo al proyecto deportivo. La masa salarial ascendió de los 518 a los 676 millones en la temporada 2022-2023. Un número que posibilitó los fichajes de Lewandowski, Raphinha y Koundé. Por el ariete polaco, se pagaron 45 millones en fijos y 5 en variables, por el extremo brasileño 58 asegurados más otros 7 opcionales y por el central francés, 50 fijos y 10 en función de incentivos por objetivos.
Como jugadors libres, llegaron Christensen, Kessié, Marcos Alonso y Bellerín, futbolistas por los que no se pagó ningún traspaso y el club sólo tenía que asumir el salario. El giro radical de la plantilla fue posible gracias al aumento extraordinario de los ingresos. El Barça vendió parte de su patrimonio a cambio de notables cantidades de dinero, las denominadas palancas con los derechos televisivos para Sixth Street y el negocio de Barça Studios.
De tener un límite de coste de plantilla negativo, de -144 millones, la entidad blaugrana pasó a tener 648 millones con los que maniobrar y configurar la plantilla después del mercado de invierno. Antes, había llegado a un máximo de 656 millones. Ahora bien, el éxito de estas operaciones financieras pasaba por triunfar sobre el terreno de juego.
Llegamos a la actualidad
El Barça, conocedor de la situación, ejecutó un plan de choque para amortiguar la caída en picado del límite salarial. La solución ya no podía ser vender más fragmentos del club. De hecho, Javier Tebas y la patronal de la Liga lo prohibieron. El club pasó la tijera por todas y cada una de las secciones. Redujo el presupuesto del baloncesto, futbol sala, balonmano y fútbol formativo. Incluso se prescindió de la histórica televisión de la institución, Barça TV, y de muchos de sus trabajadores. Facilitó el trabajo la salida de grandes salarios como los de Gerard Piqué, Jordi Alba o Antoine Griezmann, que a priori tenían contrato garantizado esta temporada. Aún así, el club sigue arrastrando los diferimientos que firmaron en su día. También de otros desportistas que percibían una gran ficha: Lionel Messi y Nikola Mirotic.
Joan Laporta consiguió rebajar la masa salarial de la institución de los 676 a los 492 millones de euros. Pese a la rebaja de 184 kilos, el límite salarial actual del Barça es de 204 millones. El único fichaje ha sido Oriol Romeu, que llegó por un módico precio de 3,4 millones. El factor decisivo de la gran reducción está en los impagos de las empresas que ahora poseen el 49% de Barça Studios y que estaban previstos para las últimas dos temporadas.
Venta de jugadores
La entidad azulgrana está atada de pies y manos. Debe buscar sustitutos de las compañías que prometieron liquidez. O, sino, la institucion azulgrana debe optar por una solución más dolorosa: vender futbolistas de la primera plantilla. Es el único método para estar bajo la 1-1 el próximo mercado de verano. Hay que conseguir cerrar el ejercicio contable con beneficios y si no entra el dinero acordado por Barça Studios, habrá que vender activos con nombre y apellidos. Frenkie de Jong, Ronald Araujo, Raphinha, Koundé o Lewandowski son los principales candidatos.
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