Estabilidad no es una palabra que encaje por completo con el FC Barcelona, sobre todo en los últimos años. No solo por los problemas deportivos y extradeportivos que han surgido en las recientes temporadas, sino también por la fuga de altos ejecutivos que parece no tener final. Este comienzo de 2024 no iba a ser la excepción, después de darse a conocer una nueva baja en el club presidido por Joan Laporta.
Tal y como informamos en Culemanía, en horas de la tarde se dio a conocer que Franc Carbó, director de gestión de fútbol desde 2017, decidió aceptar una irresistible oferta del fútbol de Arabia Saudí. Se trataba de un ejecutivo de poco impacto mediático, pero que era fundamental en el entendimiento del famoso Fair Play Financiero de la Liga, por lo que la entidad se queda sin un profesional valioso que estuvo ascendiendo cargos en el Barça por casi 15 años.
La marcha de Carbó no es aislada. Es una que se suma a una lista que está en constante expansión, siendo prácticamente algo común desde que Laporta asumió la presidencia del Barça en 2021. Muchos ejecutivos dieron por finalizado su ciclo casi inmediatamente cuando el mandatario comenzó su segundo ciclo al mando del club, aunque otros se han ido despidiendo conforme ha avanzado el proyecto. Desde especialistas en el área de gestión, hasta en la parcela deportiva.
Reverter, la apertura de la fuga
Si hay un ejecutivo que ejemplifica a la perfección esa fuga de talento en el Barça es Ferran Reverter. El que fuera CEO del club azulgrana llegó con mucha experiencia a sus espaldas y asumió el reto de ser la mano derecha del presidente para sacar a flote a una entidad que se encuentra en crisis económica. Sin embargo, la financiación del Espai Barça y el patrocinio con Spotify fueron detonantes que dieron a pie su dimisión el 8 de febrero de 2022.
Precisamente, el Espai Barça ha sigo una de las causas por las que varios profesionales dejaron sus respectivos cargos. Las tensiones y diferencias por el rumbo del proyecto ocasionaron que Ramón Ramírez, director del Espai Barça, y Jordi Llauradó (era directivo en el club), responsable de las obras, dieran un paso al costado. Tampoco hay que pasar por alto la salida Jaume Llopis, que no gozaba de rol como ejecutivo --parte de la comisión del proyecto--, por la salida de Leo Messi en agosto de 2021.
Las salidas menos sonadas
No fueron especialmente sonadas las dimisiones de Jordi Camps y Enric Llopart. El primero, fichado por el equipo de Laporta como director comercial del FC Barcelona, apenas duró cinco meses; mientras que Llopart era de los pocos altos que cargos que quedaron de la junta de Bartomeu, siendo el encargado de dirigir el área digital del club, pero se fue al no compartir la renovación del departamento impulsada por las personas de confianza del actual dirigente. Desde hace un tiempo lidera un negocio con Guillem Graell, antiguo jefe de marca del Barça, que en este caso fue despedido.
En esa misma línea se encuentra el caso de Jaume Guardiola, presidente de la comisión económica del Barça. El conocido banquero, vinculado al Sabadell durante 20 años, dejó el FC Barcelona para convertirse en presidente del Cercle d'Economía de Barcelona. Guardiola no tuvo dudas en sus preferencias, aunque igualmente sorprende que solo aguantase dos años bajo la gestión de Laporta.
La revolución en la parcela deportiva
El área deportiva del FC Barcelona no iba a ser la excepción con respecto a la fuga de ejecutivos y talentos. En el fútbol masculino están los conocidos casos de Mateu Alemany y Jordi Cruyff, quienes decidieron marcharse el pasado mercado de verano en un momento en el que el actual presidente decidió dar plenos poderes a Deco, lo que ha supuesto un problema para Xavi Hernández por los diferentes choques que han tenido en la presente temporada.
Esa inestabilidad también está afectado actualmente al Barça Femenino, la mejor herencia de Bartomeu a Laporta. A pesar de tomar un proyecto sólido y con una expectativa de gran crecimiento, los últimos meses han provocado muchas dudas con respecto al futuro de la sección. La salida de Markel Zubizarreta como director deportivo es la prueba de ello, aunque tampoco hay que dejar de lado la inminente marcha de Jonatan Giráldez, que ha decidido aceptar una propuesta en Estados Unidos.
Otro caso que tampoco se puede obviar es el de Ramon Planes. El que fuera secretario técnico del FC Barcelona se fue por diferentes motivos al de los demás integrantes de la parcela deportiva, debido a ciertas desavenencias pasadas con el entorno de Xavi Hernández. Hay que recordar que el de Lleida fue clave en los fichajes de Ronald Araujo y Pedri, dos jugadores que a día de hoy se consideran pilares en el primer equipo.
La gestión familiar de Laporta
No todas las salidas responden a un mismo motivo, pero la realidad es que trabajar en el FC Barcelona ha supuesto un reto aún más grande por la gestión familiar de Laporta. El presidente prefiere rodearse de personas de confianza en los puestos más importantes antes de optar por los mejores especialistas para nutrir al proyecto. Es parte de la filosofía del dirigente azulgrana, aunque en este segundo ciclo con el club se han acrecentado esos problemas para retener a los profesionales.