No se salva nadie: los jugadores del Barça que están en venta

Mateu Alemany señaló hace un año que el objetivo real del FC Barcelona consistía en rebajar la masa salarial sin deshacerse de "los jugadores estratégicos". El que fuera director del área de fútbol del club azulgrana alabó la plantilla de Xavi Hernández, dejando claro que había varios futbolistas que no entraban en los planes para salir en el mercado de fichajes. Sin embargo, la situación actual ha dado un vuelco significativo, llegando a plantearse el escenario de que ni un solo integrante del equipo se salva de un potencial traspaso. Todos están en venta.

La etiqueta de "intransferible" ya ha pasado a mejor vida. Ahora lo único que puede determinar el futuro de un jugador en el Barça es su rendimiento, aunque una oferta tentadora cercana a los 100 millones de euros puede hacer cambiar de opinión a la directiva de Laporta. El delicado contexto financiero --y los problemas de rendimiento en la actual temporada-- ha provocado que existan dudas con respecto al futuro de varios futbolistas que, a priori, se consideraban intocables.

La relación Deco-Xavi genera dudas

A ese panorama también han influido las normas financieras de la Liga, que han dejado al FC Barcelona en un punto de escaso margen de maniobra. "A día de hoy el club no puede incorporar a nadie", señaló Xavi tras caer en la Supercopa de España, dejando claro que se necesita dejar salir para permitir que entren nuevos fichajes. Las mismas palabras pronunció Deco, el alto cargo que está por encima del entrenador y cuya llegada ha coincidido --casualidad o no-- con una caída en picado de la confianza de Xavi, que no parece sentirse tan a gusto con su excompañero como lo estaba con Jordi Cruyff y el propio Alemany. El asunto es que son varios los que tienen el cartel de transferible colgado de cara al mercado de verano y así aliviar la economía de la entidad.

Xavi, Deco y Laporta, juntos en un acto del Barça REDES

En este sentido, existe una lista de seis candidatos para salir del Barça en verano. Es un grupo integrado por diversos futbolistas que cuentan con el suficiente mercado para ayudar a mejorar los ingresos del club en el siguiente mercado de fichajes. Entre ellos destaca la presencia de Robert Lewandowski, cuyo salario neto de 16 millones para el curso 2024-25 supone un problema para la economía del club azulgrana. El objetivo de la parcela ejecutiva es que acepte una salida a Arabia Saudí.

Los principales señalados  

Tampoco hay que pasar por alto a Ferran Torres y  Raphinha. Los dos futbolistas son de los pocos atacantes que se adaptan a las necesidades de Xavi, en especial por su capacidad para atacar el espacio y en el objetivo de la presión alta; no obstante, sus cifras son irregulares. De esos dos casos, el más optimista para el FC Barcelona es el del extremo brasileño, debido a que cuenta con mucho cartel en la Premier League,. Hay que recordar que ambos fichajes representaron 113 millones de euros --fijos-- de gastos para el club. Nos vamos a 130 millones si sumamos los 10 millones en variables de Ferran y los 7 de Raphinha. Tampoco se descartaba hacer caja con el cedido Ansu Fati, pero la lesión que sufrió hace algunas semanas lo complica. 

No obstante, en donde se encuentran más candidatos a llenar las arcas es en la línea defensiva. Araujo, Christensen y Koundé son potenciales ventas por tener un gran mercado en el fútbol europeo. El caso del uruguayo es clave, teniendo en cuenta que se ha llegado a informar que el Bayern Múnich está dispuesto a pagar entre 80-100 millones; mientras que el danés representa un negocio redondo para los altos mandos del club, tras haber llegado gratis en el verano de 2022. La expectativa del Barça es sacar, al menos, a uno de los centrales por el overbooking que existe. Asimismo, hay otros tres centrales señalados. Ellos son los cedidos Éric García y Chadi Riad, así como el jugador del filial Mika Faye. 

Los canteranos no son intocables

Uno de los grandes cambios con respecto al año pasado es que en el FC Barcelona ya no cierran la puerta a que salgan los canteranos. No tanto por el caso de Gavi o Lamine Yamal, quienes cuentan con el potencial de liderar al equipo azulgrana por muchos años, sino por la situación de Alejandro Balde. El lateral ha bajado mucho su rendimiento, lo que provoca dudas en su continuidad en la entidad. 

Alejandro Balde y Lamine Yamal, después de partido del Barça en la gira de pretemporada FCB

Precisamente el caso de Balde es uno que puede ayudar al Barça en términos de Fair Play Financiero, teniendo en cuenta que al tratarse de un canterano su venta tendría un impacto más significativo que los demás casos. Por esa razón, tampoco se descarta la opción de una salida del antes citado Ansu Fati o incluso aquellos jugadores que han estado subiendo escalones en las categorías inferiores: Marc Casadó, Ángel Alarcón o Pau Cubarsí.

Pedri y De Jong tampoco están a salvo 

Otro jugador que también se juega su futuro en el club es Pedri. No es canterano, pero su corta edad --y baja inversión-- le posicionan en ese mismo grupo que los demás jóvenes futbolistas. Dentro del FC Barcelona no dudan del talento del canario, siendo uno de los mejores de su generación; sin embargo, los constantes problemas de lesiones condicionan su peso en el proyecto deportivo. Hay que recordar que el valor de mercado del centrocampista, según Transfermarkt, es de 90 millones de euros.

Frenkie de Jong, durante una sesión de entrenamiento del Barça FCB

Además de los casos de Araujo, Raphinha, Balde, Gavi y Pedri, el otro jugador que puede dejar unos ingresos considerables en el Barça es Frenkie de Jong. El neerlandés siempre ha tenido mucho mercado entre los grandes equipos de Europa, siendo una operación que podría rondar los 100 millones de euros. Hay que recordar que hace un año y medio que la cúpula azulgrana intentó vender al futbolista, aunque ninguna de las ofertas que recibió le convenció para abandonar al conjunto de Xavi.

Ventas millonarias 

Son ese tipo de operaciones las que persigue la directiva de Laporta para la próxima ventana de traspasos. No solo permitirían dar una bombona de oxígeno a un club que se encuentra al límite, inmerso en una crisis latente, sino también dar algo de margen para moverse en el mercado. En función de los rendimientos y de las ofertas, los altos mandos deberán tomar una difícil decisión al finalizar la temporada 2023-24.