La ambición de la directiva de Joan Laporta con respecto al Espai Barça genera interés y temor a partes iguales. Se trata de un proyecto que debe convertirse en la base de la viabilidad del FC Barcelona en el futuro, por lo que existe mucha presión sobre su éxito y funcionamiento. Por esa razón, la preocupación de algunos sectores del barcelonismo es cada vez más grande por la presencia de Limak Construction como constructora encargada de la ejecución de obras, sobre todo por ser una compañía que está sumida en un contexto complicado en Turquía.
Turbulencia en Turquía
Limak Construction es una empresa que suscita ciertas dudas sobre su capacidad para llevar a cabo unas obras tan importantes, especialmente por su poca experiencia en el sector deportivo. Pero hay un factor que está provocando una mayor incertidumbre y tiene relación con la situación económica dentro de Turquía. El país se encuentra en un punto bastante turbulento en términos económicos, lo que podría tener una consecuencia negativa en el Espai Barça.
Hace pocos días se dio a conocer que en la mencionada nación subieron los tipos en 650 puntos básicos, impulsando de esa forma los intereses hasta un 15% --mientras que en Europa está al 4%--. Dicho contexto ha implicado que se desplome el valor de la lira turca de forma abismal. Marc Ciria, especialista financiero, explicó a Culemanía que "eso quiere decir que la generación de la propia economía está sufriendo muchísimo. Les ha subido el coste de la vida. El incremento de la inflación en Turquía es una autentica locura”.
Desde la perspectiva de Ciria, la incertidumbre en Turquía se puede trasladar hasta el terreno de la empresa constructora: "Si esto lo llevas a Limak, y siendo probable que ellos cobren en euros o dólares, la realidad es que es un holding y una de las empresas del grupo se dedica a la actividad portuaria, ha tenido que financiarse al 8,5% y ahora cotiza por encima del 12 de Tir". En otras palabras, la compañía afronta un panorama de inflación y costes de materiales, lo que a su vez se traduce en que padezca en su balance interno.
El problema geopolítico
Ese contexto económico tan complicado también se ha magnificado de forma considerable por la gestión del gobierno local. "Turquía no está en la Unión Europea y tiene un gobierno intervencionista, donde el gobierno presiona a su banco central en sus políticas monetarias. No hay independencia entre los órganos reguladores del mercado y eso implica que la inflación se ha disparado. Tan solo hay que recordar que la inflación llegó a incrementarse en un 80% el año pasado", señaló Ciria.
Por esa misma razón, entrar en una alianza tan importante para las obras del Espai Barça con una empresa que forma parte de dicho contexto geopolítico supone un riesgo considerable. No existe una certeza total con respecto al futuro, en especial por las implicaciones que pueden darse con aquellos elementos que van a ser necesarios para el desarrollo de la importante construcción del estadio del FC Barcelona.
Incertidumbre con el Espai Barça
Como hemos mencionado anteriormente, una de las consecuencias directas del contexto financiero que puede afectar a Limak Construction es el posible encarecimiento de los materiales que van a necesitar en las obras. La devaluación de la moneda local y el incremento de los costes dentro de la propia compañía representan un par de factores que no pueden pasarse por debajo de la mesa, sobre todo al tratarse de un Camp Nou que se va a construir desde prácticamente cero. Esto implica que los precios de compra podrían ser diferentes a los planteados al comienzo del proyecto.
De acuerdo a lo explicado por el especialista financiero, el Barça ha tomado un riesgo bastante grande al acordar las obras con Limak en un escenario de mucha tensión económica en el panorama internacional. “La gente piensa que un 6,5% de interés (financiación del proyecto) es competitivo, pero hace más de un año te habrías financiado al 2%. Lo ideal habría sido esperar a un tipo de interés más favorable, en donde en el balance puedes tener más caja para encarar este endeudamiento”.
Ese es el gran peligro al que ha decidido exponerse la directiva de Joan Laporta con el Espai Barça. La decisión de priorizar la rapidez y tener un coste más accesible está dejando al club azulgrana en un panorama de mucha incertidumbre. Un aliado que traerá bastantes preocupaciones al FC Barcelona, que todavía mantiene la esperanza de que se cumplan los plazos establecidos para regresar al Camp Nou.