La estatua desconocida de un futbolista del Barça que se esconde en este museo de Barcelona
Bautizada como ‘El campeón’, es obra del artista Luciano Oslé
29 mayo, 2024 14:10Noticias relacionadas
Se conoce como El campeón, es obra del artista Luciano Oslé (Barcelona, 1880-1951), que también esculpió la placa de las bodas de oro del Barça, y está expuesta en uno de los principales museos de Barcelona. Sin embargo, pocos reparan en que esa escultura, de bronce, es una de las primeras que se realizaron de un futbolista azulgrana. Tiene más de un siglo y no deja a nadie indiferente.
Para contemplar la estatua hay que ir al Museo Olímpico y del Deporte Juan Antonio Samaranch, aunque antes pasó por otros lugares, como el Estadio Olímpico, donde se expuso con motivo de la Expo de 1929. Pero, primero, se pudo disfrutar en la VI Exposición Internacional de Arte de 1911, en el Palacio de Bellas Artes de Barcelona. Ahora bien, ¿a quién representó el bueno de Oslé?
Cuatro hermanos
El jugador representado es Tiago Massana Urgellés, nacido en la capital catalana en 1890, y, a decir verdad, Oslé esculpió la estatua antes de que este imponente defensa vistiera los colores azulgranas (solo lo hizo una temporada, en la 1915-16, aunque como capitán). Es más, el jugador llamó la atención del artista en su etapa en el Espanyol (1909-15), donde desarrolló gran parte de su carrera balompédica.
[Los Massana y otros hermanos futbolistas que jugaron en el Barça… y en el Espanyol]
Massana era hijo de Félix Massana y Fanny Urgellés, y tenía tres hermanos: Alfredo (futbolista, como él, y abuelo del pianista Tete Montoliu), Emilia y Odila. En todo caso, comenzó su andadura en el Ibérico (1903-04), siguió en el X (1904-09), dio el salto al Espanyol y al Barça, y terminó con apariciones esporádicas en el Universitary y el Vilafranca, como explica El árbol del Barça (Círculo Rojo).
Aventurero
Como azulgrana, Tiago Massana disputó 35 partidos, marcó un gol y levantó un Campeonato de Cataluña. Pero destacó también en otros deportes. Por ejemplo, fue plusmarquista de triple salto en 1916 y de lanzamiento de peso en 1917, además de lanzador de disco y jabalina, y jugador de rugby.
No obstante, si por algo se distinguía era por su carácter bohemio y aventurero. Retirado de la práctica deportiva, no dudó en marcharse primero a Suiza para buscar empleo en una casa de importación de fruta y, después, a Brasil, donde compró una isla en el Estado de Pará para su explotación, e hizo fortuna. Las circunstancias le llevaron a ello, porque había empezado a trabajar de secretario en el Sindicato Único de la Madera y se vio involucrado en la convulsa vida política que sufrió Barcelona a principios de la década de 1920.