El clásico es uno de los partidos que más atención genera en todo el mundo. Dos de los equipos más importantes, FC Barcelona y Real Madrid, se miden en una jornada en la que van a dejarlo todo para hacerse con la victoria. Con el paso de los años fue subiendo la intensidad de cada uno de esos choques, llegando a darse intensas guerra en los terrenos de juego.
Aunque muchos creen que esa intensidad viene de la época en la que Pep Guardiola y José Mourinho dirigían a Barça y Real Madrid, respectivamente, lo cierto es que el comienzo de esa guerra en los clásicos data de hace un montón de décadas. Precisamente, el libro El Clásico: historias y anécdotas de una rivalidad eterna escrito por Frederic Porta y Manuel Tomás permite hacer un repaso de cuál fue el punto de partida que explica a la perfección esa enemistad que ha existido, tanto en los campos como en los despachos.
¿Cuándo empezó la guerra?
En este sentido, Tomás explica en una entrevista concedida en El Periódico que el punto inicial de las hostilidades entre los dos clubes es con todo lo relacionado a Alfredo Di Stéfano, mito de la entidad merengue y que estuvo a nada de convertirse en uno de los fichajes estrella del Barça. Concretamente, la fecha que empieza a cambiar la mentalidad con respecto a la rivalidad es en el año 1953.
"La dictadura franquista, con muchas malas artes, hizo que de forma fraudulenta Di Stéfano llegara al Madrid y se inició la primera época gloriosa del equipo blanco con las primeras Copas de Europa consecutivas y es cuando en la mentalidad del aficionado azulgrana se plantó esta idea tan fastidiosa que a partir de entonces el Barça tenía que luchar siempre contra algo más que un rival deportivo, que había algo más que iba contra el Barça", señala uno de los autores del libro.
Del mismo modo, los escritores también reflejan que la rivalidad se intensificó de manera feroz fuera de los terrenos de juego. "Trascendía lo deportivo para ir a lo sociopolítico. Si el Barça era recibido mal en Chamartín no era por ser el Barça, sino por ser un equipo catalán", comentaron.
La hostilidad de los clásicos
Son muchos los clásicos que han dejado episodios que han quedado registrados en la historia del fútbol mundial. Algunos por exhibiciones de lado y lado, otros por darse situaciones que manifiestan esa rivalidad tan intensa. Desde la perspectiva de Porta, los recibimientos más hostiles en Barcelona o Madrid fueron los siguientes: "El 11-1 en el campo del Madrid, sin duda, del 43. Y el recibimiento a Figo es insuperable".
Esas semillas del pasado terminaron floreciendo en una rivalidad muy especial en el fútbol internacional. Por esa razón, azulgranas y merengues suelen dar su máximo esfuerzo para hacer la vida imposible a su rival en el campo y así llevarse la victoria. El siguiente clásico del 21 de abril será el número 257, donde se espera otra historia particular que permita seguir ese historial de momentos únicos.