La sección 8º de la Audiencia de Barcelona ha desestimado el recurso de apelación de Hugo Mallo y ratifica la condena correspondiente al delito de abuso sexual a la mujer que trabajaba como la mascota del RCD Espanyol. Los seis jueces que forman parte del tribunal han denegado la solicitud del que fuera capitán del Celta de Vigo.
"El acusado, con la intención de satisfacer su ánimo libidinoso y de menoscabar la indemnidad sexual de la misma, le metió las manos por debajo del disfraz y le tocó los pechos", señala la sentencia. Hay que recordar que los hechos sucedieron el 24 de abril de 2019 en el RCDE Stadium, después de un enfrentamiento entre el Espanyol y el Celta.
Condenado
La Audiencia de Barcelona ha revocado de pleno la presunción de inocencia a la que pretendía acogerse Hugo Mallo, debido a que la condena sí se basaba en pruebas inculpatorias, tanto el testimonio de la víctima como los vídeos aportados en el proceso del juicio.
En la misma sentencia también señalan que el juez impuso a Mallo una sanción económica de 24 meses, tal como habían solicitado al unísono la acusación y la Fiscalía, que se elevaba a unos 7.000 euros. El exfutbolista del Celta de Vigo también debe abonar el pago integro de las costas procesales, incluyendo los de la víctima.
Lejos de España
Hugo Mallo, un año antes de estallar la polémica de los abusos sexuales, decidió abandonar al Celta de Vigo para emprender una nueva etapa fuera del fútbol español. Tuvo un breve paso en el Internacional de Porto Alegre brasileño y ahora milita en el Aris de Salónica de la competición griega.
"Al principio no me lo creía, creía que era una broma", fue lo que expresó Mallo en su defensa el pasado mes de julio. Las pruebas que se proporcionaron en el juicio fueron lo suficientemente contundentes para que la Audiencia de Barcelona decida confirmar uno de los episodios más polémicos del fútbol español en los recientes años.