El período de préstamo de Ansu Fati en el Brighton no ha prosperado como el delantero esperaba a principios de temporada. El heredero del 10 de Leo Messi en el Barça también ha sufrido la desgracia de las lesiones en la Premier League. Para más inri, el entrenador Roberto De Zerbi le ha mandado mensajes directos tanto en rueda de prensa como en los últimos partidos.
Sin embargo, el cedido del FC Barcelona no está solo. Cuenta con el respaldo de Bojan Krkic, juguete roto del club azulgrana que ahora vela por la salud mental de las promesas de la Masía. El coordinador del área de fútbol de la entidad, un veterano de guerra en la lucha contra la ansiedad, ha presentado su nuevo libro Controlar lo incontrolable. El canterano azulgrana relata en esta autobiografía los problemas psicológicos que sufrió durante su ascenso precoz al primer equipo del Barça.
Toda la carrera por delante
A pesar de que muchos se han apresurado en enterrar a Ansu después de salir del club azulgrana por la puerta de atrás, Bojan recuerda que el atacante solo tiene 21 años en una entrevista con Mundo Deportivo: "Ansu sigue siendo un jugador joven. Parece que lleve veinte años, pero es joven. Ha sufrido lesiones importantes, ha jugado en el primer equipo, sigue perteneciendo al club y esta jugando en la Premier League. Le doy mucho mérito. Hay que estar tranquilos, hay que acompañarle y ayudarle, que esté bien, minimizar el máximo posible lesiones.
Lo cierto es que el artillero biseuguineano todavía tiene contrato en vigor con el equipo catalán hasta 2027. El director deportivo, Deco, tendrá que decidir su futuro nuevamente con el jugador una vez regrese a Barcelona en verano de 2024. Por el momento, Bojan ha defendido al pupilo del Barça de su técnico en el Brighton, Roberto De Zerbi: "Ahora está en un club donde el entrenador, por mucho que haga las declaraciones que haga, sabe qué jugador es Ansu, sabe lo que le puede dar".
Castigado
Y es que los medios han cuestionado recientemente al estratega italiano sobre las últimas suplencias. Sin ir más lejos, dejó a Ansu en la grada en el último encuentro contra el Brentford (0-0). El míster oriundo de Brescia considera que el futbolista propiedad del Barça debe "mejorar su condición física y su mentalidad, porque para jugar en la Premier League tienes que ser más fuerte mental y físicamente". El entrenador quería que "Fati y Valentín Barco trabajaran en solitario" y por ello "decidí que no estuvieran en este partido".
Ansu ya había presenciado la derrota anterior contra el Liverpool (2-1) íntegramente en el banquillo, pese a entrar en la convocatoria. Desde su regreso de lesión en febrero, solo ha sumado dos titularidades entre siete suplencias, y cero goles. La última afectación en los músculos isquiotibiales de la pierna derecha alejó al crack barcelonista tres meses de los terrenos de juego. Los problemas físicos tampoco le han dado tregua al canterano salido de la Masía, que todavía lucha por reencontrarse en Inglaterra.