Ni La Cúpula ni Can Ferran: así es el restaurante a las afueras de Barcelona que cautiva a Pedri y Cubarsí
- En el Barça está de moda un local recomendado por la Guía Michelín desde el año 2020
- Más información: el restaurante de la capital catalana especializado en cocina catalana que tiene enamorado a Hansi Flick
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La plantilla del Barça lo tiene claro. No hay vistas como las de La Cúpula del Garraf, lugar predilecto para los futbolistas que viven entre Gavà, Castelldefels y Sitges. Y, si quieren comer todos juntos, en modo concentración, el lugar de preferencia es Can Ferran, uno de los favoritos durante la etapa de Xavi Hernández pero al que también ha recurrido el actual entrenador, Hansi Flick. Ahora bien, si quieren una comida de calidad, para chuparse los dedos, no hay restaurante como La Bonaigua.
En Sant Just Desvern, en Carretera Reial número 54, se halla este local de cocina catalana. A 30 minutos en coche de Barcelona, La Bonaigua cautiva a muchos futbolistas del Barça. Entre ellos, a Pedri y Pau Cubarsí, que fueron hace no mucho y disfrutaron de los platos que prepara el chef Víctor Pardo, formado en los fogones del legendario Celler de Can Roca.
Alto 'standing'
La Bonaigua llevará 35 años abierto en 2025. En 1990, recibió sus primeros clientes y ahora es la segunda generación de la familia la que lleva el negocio. El esfuerzo ha dado sus frutos y están recomendados en la Guía Michelín desde el año 2020.
La Bonaigua ofrece solo productos frescos, cocinados de manera sencilla. El ambiente, agradable y tranquilo para compartir una comida con amigos y familiares, va acompañado de una decoración tradicional, pero adaptada a los nuevos tiempos. Es lo que ha hecho que todo jugador, directivo y leyenda del deporte catalán sea un habitual en las mesas del restaurante de Sant Just.
Cocina catalana
Joan Laporta, Pep Guardiola, Xavi Hernández. Todos han pasado por la sala de La Bonaigua. También los Estopa o Pau Gasol. Su cocina tradicional y, sobre todo, la calidad del producto hacen que sea un lugar de referencia para el típico entorno culé.
El plato de embutido de Vic, la berenjena escalivada, la croqueta de rustido, la brandada de bacalao, los pies de cerdo a la brasa o el arroz seco de cigalas son algunos de los platos que protagonizan la corta carta de La Bonaigua, un restaurante que no pierde la esencia de la cocina catalana.