El técnico del Manchester City, Pep Guardiola, es una de las figuras más queridas y admiradas en Barcelona. Su legado como jugador y entrenador en el Barça tuvo un valor incalculable y su nombre está escrito con letras doradas en la historia del fútbol. Ahora que Joan Laporta busca entrenador, su nombre ha vuelto a vincularse al Barça. Es el favorito del presidente y todo el mundo lo sabe.
Formó parte del Dream Team bajo las órdenes de Johan Cruyff y lideró al mejor Barça de la historia desde el banquillo. Conquistó 14 títulos con un dominio abrasivo y fue capaz de implementar una idiosincrasia reconocida en todo el mundo.
Ahora en Manchester, tras pasar previamente por Múnich, el entrenador ha sido capaz de inculcar su forma de entender el juego en una competición tan reacia al fútbol asociativo como es la Premier League. La temporada pasada conquistó un triplete que ya es historia del fútbol inglés y consolidado la marca City Group en la élite.
Pese a residir en Inglaterra, el catalán tiene un amplio patrimonio. Una de esas joyas que tiene en propiedad pasa por una increíble mansión en la lujosa zona de La Pedrera, en Barcelona. Según informó Crónica Global, adquirió la vivienda en febrero del 2021 a cambio de 10 millones de euros. Se trata de un terreno de 2.114 m² y un edificio que asciende hasta los 741 m².
Así es la lujosa mansión de Guardiola en Barcelona
La casa está ubicada al lado de la carretera de les Aigües, junto a la montaña de Sant Pere Màrtir, y cuenta con unas vistas exclusivas panorámicas de la ciudad. Además de su decoración minimalista, cuenta con amplias zonas exteriores y una piscina. Destaca también su amplia cocina americana con parquet.
La casa cuenta, por otro lado, con una curiosidad destacable. Actualmente, está en propiedad de Pep Guardiola y Cristina Serra, su pareja, pero antes estuvo en posesión del exjugador del FC Barcelona y vigente entrenador del Barça Atlètic, Rafa Márquez. El mexicano estuvo un largo periodo en el primer equipo y decidió vender la propiedad cuando su marcha al fútbol norteamericano fue una realidad.