La Guardia Civil traslada al detenido por la muerte de un niño de nueve años en Lardero /EP

La Guardia Civil traslada al detenido por la muerte de un niño de nueve años en Lardero /EP

Sucesos

Un policía local intentó salvar la vida con un desfibrilador al niño asesinado en Lardero

El autor del crimen ha ingresado en la cárcel de Logroño bajo prisión provisional sin fianza y acusado de "intento de homicidio"

3 noviembre, 2021 11:18

Salen a la luz nuevos datos de la muerte de Álex, el pequeño de tan solo nueve años que murió asesinado por un vecino de Lardero (La Rioja) la noche del jueves 28 de octubre. Según las últimas informaciones, Francisco Javier Almeida, presunto culpable de la muerte del menor, fue sorprendido por una patrulla de la Policía Local y otra de la Guardia Civil en el interior del edificio en el que residía.

De hecho, fue uno de los agentes del cuerpo local, quien le arrebató al pequeño, todavía, con vida de los brazos mientras sus compañeros se abalanzaban y detenían al autor del crimen. Los hechos ocurrieron viente minutos antes de las nueve de la noche, en el interior del número 7 de la calle Río Linares de la localidad logroñesa.

20 minutos

Al parecer, el agente local dejó al pequeño bajo los cuidados de sus compañeros del instituto armado, a la espera que llegase la ambulancia, avisada a las 20:40 horas. Desde que la madre de Álex denunció su desaparición, 20:20 horas, hasta que el servicio de emergencias recibio el aviso en el que se solicitaba una ambulancia tan solo transcurrieron 20 minutos.

Mientras tanto, el agente se dirigió al coche, en busca de un desfibrilador con la esperanza de recuperar al infante de la parada cardiorrespiratoria en la que se encontraba. Sin embargo, ni el policia ni los sanitarios desplazados hasta el lugar de los hechos pudieron hacer nada para salvarle la vida.

Muerte por asfixia 

Según revelan los primeros informes, Álex falleció asfixiado. Prueba de ello serían las marcas que presentaría en el cuello. Asimismo, las pesquisas de los investigadores apuntan a que Almeida pretendía cargar el cadáver del pequeño en el maletero de su nuevo vehículo con la misión de deshacerse del cuerpo.

Francisco Javier permanece ingresado bajo prisión provisional sin fianza en el centro penitenciario de Logroño desde el pasado domingo 31 de octubre, cuando la juez de Instrucción número 2 decretó su ingreso por un presunto delito de homicidio. El reo, que se encuentra acompañado por un preso de apoyo y con protocolos antisuicidio, había salido de prisión en 2020 después de cumplir condena por el asesinato de una agente inmobiliaria en 1998.