Una foto de archivo de el Papa en un discurso dirigido hacia los sacerdotes de la Iglesia Católica / EP

Una foto de archivo de el Papa en un discurso dirigido hacia los sacerdotes de la Iglesia Católica / EP

Sucesos

Orgías gais y fiestas con prostitutos en el seno de la Iglesia

Un informe de 1200 páginas sacude toda Italia y el Vaticano al implicar a doce arzobispados y 60 sacerdotes que utilizaban una aplicación para mantener relaciones homosexuales

1 marzo, 2018 17:20

Un informe de 1200 páginas ha sacudido a sacerdotes de toda Italia, incluído el Vaticano, al relatar –con elementos gráficos que lo demuestran–, la existencia de orgías homosexuales, contratación de prostitutos y conversaciones sexuales mediante mensajería telefónica.

El dossier, que afecta a doce arzobispados y cerca de 60 sacerdotes, ha sido reconocido por el arzobispado de Nápoles y asegura que su contenido será investigado: "El material será oportunamente examinado para ser enviado a las diócesis interesadas para su eventual evaluación", afirman en un comunicado. 

Un prostituto, el revelador de la información

El informe ha sido revelado por Gaynews.it, que afirma que obispos, frailes, religiosos y seminaristas utilizaban una aplicación para relaciones homosexuales. Entre la información que contiene el dosier se encuentran fichas de los implicados, además de pantallazos de conversaciones sexuales de los religiosos en esta aplicación.

El informe fue entregado en un CD por un joven napolitano que se dedica a la prostitución, al que le habían solicitado sus servicios los miembros de la institución católica.

Homofobia en la Iglesia

Se trata de otro golpe para la Iglesia católica, que se ha mostrado contraria a la homosexualidad y se ha visto rodeada de diversas polémicas por los comentarios homófobos de algunos de sus miembros.

El cardenal emérito Rouco Varela, expresidente de la Conferencia Episcopal, definió el matrimonio homosexual como "la rebeldía del hombre contra sus límites biológicos". Su compañero Fernando Sebastián, también cardenal elegido por el papa Franciso, afirmó en una entrevista que "la homosexualidad es una deficiente sexualidad", y que el 'problema' "se puede normalizar con tratamiento".