Una imagen del hombre conduciendo su silla de ruedas por el carril de aceleración de la autovía de Málaga / TWITTER

Una imagen del hombre conduciendo su silla de ruedas por el carril de aceleración de la autovía de Málaga / TWITTER

Sucesos

Multan a un hombre por conducir su silla de ruedas por una carretera de Málaga

Tendrá que pagar 480 euros por un delito de desobediencia, aunque originalmente también estaba acusado de un delito contra la seguridad vial

9 agosto, 2018 19:11

Un juzgado de Málaga ha condenado a un hombre a pagar una multa de 480 euros por ir con su silla de ruedas por la carretera MA-21. En un primer momento, estaba acusado de delitos contra la seguridad vial y de desobediencia a la autoridad, pero finalmente solo será sancionado por el segundo.

El protagonista de los hechos es un señor de 67 años, con una discapacidad superior al 70%, que además se encuentra tutelado por una fundación de atención a discapacitados en régimen de curatela. Pero nada le impidió darse una vueltecita por las carretera circundante de la ciudad malagueña.

Desvío en el carril de aceleración

El individuo conducía la silla de ruedas motorizada en el carril de aceleración para acceder a la autovía de Málaga. Sin embargo, antes de entrar a esta se desvió hacia la MA-21, concretamente, hacia un paso conocido como el puente de la Azucarera, en la salida de la ciudad en sentido a Torremolinos.

El “vehículo”, que alcanza una velocidad máxima de 15 kilómetros por hora, fue grabado por un conductor y subido a las redes sociales, que lo hicieron viral por la zona.

Acusado de ocasionar un accidente

En un primer momento, el hombre fue acusado del delito contra la seguridad del tráfico y se le imputaba haber ocasionado un accidente entre dos vehículos, un hecho que, más tarde, se comprobó que no era cierto. Además, los abogados de la defensa alegaron que la ley que lo regulaba no era aplicable al acusado ya que se trataba de un peatón (así constaba en el informe de la DGT del atestado) y no existía en su actuación ni grave riesgo (la silla motorizada llevaba un chaleco reflectante colgado y las linternas roja trasera y blanca delantera funcionando) ni dolo.

El Fiscal admitió el argumento per apreció conducta reiterada y desobediencia a la autoridad. Se encontraron varios vídeos y fotos y la actitud del señor fue “desafiante” mientras los policías interrogaban a testigos de los hechos--quiso subir a la silla y continuar la marcha--.