En Parla (Madrid), una agente de la Policía Nacional ha salvado la vida de una bebé de 22 meses después de que un padre entrase durante la tarde del 2 de marzo en la comisaria pidiendo auxilio.
El hombre, que paseaba a su hija pequeña en un cochecito, se adentró en la dependencia policial al ver que la pequeña se había atragantado con un regaliz y que no respiraba.
La pequeña no respondía a estímulos
Acto seguido, la niña, que no respondía a estímulos y presentaba la boca amoratada, fue atendida rápidamente por los miembros del cuerpo que le practicaron diferentes maniobras sin éxito.
Finalmente, una agente de la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano salvó la vida de la pequeña de una muerte por asfixia, practicándole rápidamente la maniobra de Heimlich a la pequeña.
La maniobra de Heimlich
Esta técnica de primeros auxilios se utiliza para desobstruir un conducto respiratorio, normalmente bloqueado a causa de un alimento u objeto. La maniobra consiste en aplicar presión en la zona abdominal para levantar el diafragma. Un hecho que obliga al aire a salir de los pulmones, provocando una tos artificial.