Jorge Javier Vázquez recuerda su dura infancia: "Desde niño me ha acompañado la palabra 'maricón'"

Jorge Javier Vázquez se ha sincerado como nunca sobre la dura infancia que vivió por ser homosexual. Una época en la que el presentador de Badalona recibía insultos diarios por su condición sexual. Y lo ha hecho a través de un duro testimonio en su blog de la revista Lecturas que no va a dejar a nadie indiferente. 

“Antes de ser maricón era ‘el maricón’. Quiero decir que antes de que yo tuviera claro que me atraían los hombres los demás ya lo daban por supuesto. Quizás porque me gustaba pasar más tiempo con las niñas. O porque era un negado para el fútbol. O porque era un poco afeminado”, confiesa el presentador de Sálvame. 

Miedo y dolor

Una época que recuerda con mucho dolor, no solo por él, sino por su familia: “Recordar el miedo a que mis padres se enterasen de cómo me llamaban. A defraudarlos. A que se sintieran avergonzados por mi culpa”. Sin embargo, el emperador de la telebasura cree que, a pesar de todo, tuvo suerte. “El sufrimiento fue soportable. A veces me provocaba mucha angustia. Y miedo. Y soledad. Y ansiedad. Pero tengo que decir que no sufrí acoso en el colegio. Que no me pegaron por ser marica. Que lo utilizaban como un insulto, pero no me hicieron la vida imposible”, desvela.

Y es que el comunicador compara su situación a los últimos acontecimientos, como el asesinato de Samuel, y considera que vivió “una utopía”. “Lo que me produce auténtico pavor es que vayan pasando los años y, en vez de avanzar, retrocedamos”, se lamenta. “Parece que volvamos ahora a la casilla de salida del oscurantismo”, reprocha el conductor de programas de Telecinco. 

Autocrítica

Jorge Javier aprovecha para hacer autocrítica hacia los medios de comunicación. “No entiendo cómo hemos sido tan permisivos con esos discursos que atentaban contra nuestra dignidad [...] Hemos dado voz a personajes que se han dedicado a sembrar odio y destrucción. Y lo hemos hecho en aras de una mal entendida libertad de expresión, porque considerábamos que era democrático dar voz a todo el mundo”, apunta. 

Pero no todo vale. “No podemos seguir dando voz a aquellos que alimentan la intolerancia. No podemos ser tibios en este asunto. O se está con nosotros o contra nosotros”, estalla el presentador. “Se están incrementando de una manera altísima las agresiones a miembros del colectivo. La gente vuelve a tener miedo de salir a la calle, algo que hacía muchos años que no existía”, argumenta. 

Derechos

“Una sociedad que no acepte la diversidad es una sociedad echada a perder. Intolerante. Agresiva. A nadie se le obliga a ser gay. Lo que no debemos tolerar es que se nos rechace por nuestra condición sexual. Que no tengamos los mismos derechos que los demás. Que no podamos vivir en libertad, sin miedo”, expresa el catalán.

Por último, Jorge Javier pide recuperar la conciencia colectiva: “Tenemos que plantarles cara, hacerles frente, no dejarles pasar ni una”. La obligación de una sociedad comprometida es mirar siempre hacia delante, no repetir errores del pasado y luchar para que, año tras año, década tras década, el ser humano sea cada vez más libre. Si lo que conseguimos, por el contrario, es repetir oscuros esquemas del pasado habremos fallado. Hoy por hoy, estamos fallando. Pongámonos a rectificar ahora mismo”, solicita.