Ana Obregón desata la polémica en redes sociales al confesar cuál es su político favorito

Ana Obregón ha desatado la polémica en las redes sociales. A sus 67 años, la bióloga, actriz y presentadora ya no se corta e incluso se atreve a opinar sobre política estatal justo cuando Pedro Sánchez y su Ejecutivo se han enfrentado al primer debate de estado de la Nación.

La madrileña reconoce que no confía ni cree en las personas que dirigen o intentan dirigir España y asegura que lo único que ve “es una lucha de egos, una pelea por las sillas, un ring de boxeo". Con todo, para ella, solo hay candidato que se salva: “Es el mejor preparado”, ha declarado en una entrevista a Yo Dona.

Ana lo tiene claro 

De este modo, Obregón ha revelado su predilección por el gallego y nuevo líder popular Alberto Núñez Feijóo. “Lo tengo claro”, ha apostillado al ser preguntada por él a pesar de reconocer que ha perdido la fe en las siglas de las formaciones.

"Cuando todos los partidos, de un lado y de otro, se dedican a robar ese dinero mientras nuestro país atraviesa un momento tremendo, con gente que apenas puede pagar la luz... Ya no puedo tener fe en las siglas. En todo caso, en las personas detrás de esas siglas", ha afirmado para dejar clara su postura a favor de Feijóo.

Acusa al gobierno y a la oposición 

La actriz atiza a la clase política, al gobierno y a la oposición a quienes tilda de ladrones y recrimina que no investiguen ni destinen más dinero en la lucha contra el cáncer, enfermedad que se cobró la vida de su hijo a la temprana edad de 27 años, en 2020. Y es que a Ana no le tiembla la voz para denunciar que “nadie ha movido un dedo” para intentar poner fin a “la pandemia silenciada”.

Desde la muerte de Aless, la presentadora confiesa que ha aprendido “a estar en la oscuridad” fingiendo que vive, respira, trabaja y exista. Si bien lo cierto es que vive volcada en las labores de una fundación a la que puso el nombre de su hijo y que intenta recaudar fondos para lograr nuevos avances científicos en la lucha contra la enfermedad.