Tania Medina habla sobre su delicado estado de salud tras 'Supervivientes'

La vuelta de Tania Medina a España tras su aventura por Supervivientes ha sido de todo menos tranquila. La sexta expulsada del reality ha vuelto a sus redes sociales y, con ello, ha querido contar a sus seguidores las secuelas y el delicado estado de salud que le ha dejado su estancia en los Cayos Cochinos.

En concreto, se trata del estómago: la canaria ya sufrió un duro percance en la isla por el que, incluso, tuvo que ser evacuada para que los médicos la controlasen. Pues bien, parece ser que esa dolencia ha persistido a su regreso: "Aún siento el síntoma de la tripa hinchada, cada vez que como se me hincha mucho y estoy muy molesta".

Problemas intestinales

De hecho, esto le pasa hasta bebiendo agua: "Estoy muy malita de la tripa. Me bebo un vaso de agua y exploto de lo llena que estoy", ha confesado. Así las cosas, ha querido tranquilizar a sus seguidores de que, a pesar de que está muy "triste y malita", ya no tiene "náuseas ni fiebre".

Es por ello que ha optado por cambiar su alimentación y comer productos sanos y frescos: "He ido a hacer la compra, todo cositas sanas, para seguir cuidándome de la tripa. Estoy muy contenta porque ya me apetecía sentirme en rutina". Tania tiene la voluntad de volver otra vez a estar "al 100%" y volver a hacer las cosas que hacía habitualmente, como ir al gimnasio: "Quiero ir poquito a poquito".

Planes futuros

Pero para que esa recuperación se dé lo antes posible, la novia de Alejandro ha asegurado que se va a poner en manos de los mejores especialistas para cuidarse todo lo posible: "Gracias a mi suegra que me ha ayudado, me he buscado un buen doctor en El Puerto, así que tendré que buscarme un huequito la próxima semana para ir".

Respecto a sus planes más inmediatos, la exsuperviviente tiene previsto pasar unos días con la familia de su chico en su pueblo, El Puerto de Santa María, donde vivieron juntos antes de participar el verano pasado en La isla de las tentaciones 4. Además, también está deseando reencontrarse con su chico, que todavía sigue en Honduras: "Mi niño no puede estar más guapo, ¡qué ganas de abrazarte!".