Kiko Rivera no acabó 2021 con buen pie y el 2022 no arranca mucho mejor. No, no hablamos de su mala relación con Isabel Pantoja, a la que no ha ido a ver en todas estas navidades y fechas especiales.
El DJ actuó este 26 de diciembre en el club ovetense El Llagar de Colloto, en Asturias y los testigos no están muy satisfechos con el espectáculo ofrecido. Ni siquiera los organizadores que vieron como el artista arremetía contra ellos.
Testigos de la fiesta
Una de las personas allí presentes relata que “cada cinco canciones” abandonaba la cabina, se le veía “perdido”. La gente parece que no disfrutó mucho de su presencia y lo que debía ser una actuación de dos horas se quedó en mucho menos.
Ante los comentarios de que Rivera haya “vuelto a las andadas”, el cantante se ha defendido. Lo hace a través de su canal de Twitch donde no deja títere con cabeza. Ni los asistentes a los que llama "hijos de puta", ni lo responsables del lugar se salvan y, además, Telecinco también se lleva parte de la culpa.
Ataques de Kiko
Paquirrín asegura que su actitud se debe a que en el local había “más de 200 personas” y la mayoría de ellas iba sin mascarillas. Acusa a sus responsables de no velar por la seguridad de los presentes ni del artista. “Lo que no se puede hacer es organizar eventos”, señala. “El dinero va y viene, panda de hijos de puta, y si no puedes ganar dinero te jodes”, espeta a los empresarios a los que llama “cabezas locas”.
No han sido los únicos. Al ver que la cadena de Mediaset se hacía eco de las reclamaciones y quejas por su actitud les ha enviado “a la mierda”. Unas palabras que sólo han servido para cuestionar más la actitud de Kiko.