Duros momentos para Sandra Pica y Julen. La expulsión del vasco ha dejado destrozado a la catalana que, gracias al programa, se ha dejado despedir de él.
“Tengo un cortocircuito mental que no te lo puedes creer”, le confesaba a Jorge Javier Vázquez antes de que le dieran la mala noticia. Su único deseo, “siendo egoísta”, es que se quedara su chico.
Historia de amor
Cuando le han puesto el momento de la expulsión de Julen, Sandra se ha llevado las manos a la cara y se ha puesto a llorar. “Él me lo decía y yo no quería verlo”, señala y recuerda que se habría “cambiado por él sin pensarlo”.
Julen y Pica han protagonizado “una bonita historia de amor” dentro de la casa en palabras de Jorge Javier, por mucho que Tom Brusse no le dé credibilidad. Y los responsables del reality le han recordado cómo ha sido su aventura.
Lágrimas
Los dos se sonreían al verse. Sandra no se atreve a decir si el vasco es el hombre de su vida, sólo que “quiere vivir lo que tenga que vivir con él”. Y ahora teme cómo van a ser los días que le quedan en el concurso.
“Es como un amigo con el que nos queremos”, “es una persona que me ha hecho creer que el amor sí que existe y que el amor es bonito”, lo describe. Poco después, lo veía tras un cristal. “Te quiero mucho. Estate bien”, le confesaba él a través de un cristal.