El exnovio de Avilés deja al descubierto todos los trapos sucios del colaborador frente a Kopernica

La costa está que arde. Antonio Vega se ha enfrentado este jueves a Kopernica para demostrar su verdad sobre la relación que ha mantenido con Avilés. Tras dejar al descubierto todas las mentiras que le había contado el colaborador de Viva la Vida, el estilista malagueño ha reconocido que no llegó a sentir mariposas en el estómago por él.

De hecho, a la pregunta: "¿Retrasaste el momento de mantener relaciones con José Antonio Avilés porque realmente no te gustaba?", ha respondido que sí y la máquina de la verdad ha determinado que dice la vedad.

Chelo, la nueva víctima de Avilés

Sin embargo esta no era la única certeza de la tarde. Y es que Vega no mentía al afirmar que el cordobés le había dicho que él fue el creador de la serie Rocío, contar la verdad para seguir viva. Además, ha dejado al descubierto otro nuevo embuste de su ex al asegurar que Chelo García Cortés le había pedido 2.500 euros.

Por si fuera poco, el malagueño ha desvelado que le pidió consejo a él porque, al parecer, se encontraba indeciso. Finalmente, la periodista ha estallado. Chelo, hecha un mar de lágrimas, ha desmentido que Avilés le haya prestado dinero, pese a reconocer su maltrecha situación económica. 

Chelo estalla en directo

"Avilés dice que no pero como es Chelo vamos a dudarlo, ¿no? ¡Estoy hasta las narices! Si tuviera que pedir... He pedido, lo he devuelto y no he tenido que pedir de nuevo en la vida. Ya está bien. Hay que tener dignidad para pedir y devolver. Hago mi vida como puedo", ha manifestado. 

A todo ello, el colorador más embustero de Telecinco ha llamado a Belén Esteban para desmentir también lo que decía su ex. No obstante, Kópernica seguía dando la razón al invitado, que incluso se ha atrevido a responder a las preguntas de si era verdad que José Antonio le aseveró que iba a participar en Élite y que le dijo que no se operaba de fimosis porque "eso se regeneraba". Y, ojo, porque el bien plantado estilista no miente.