Es oficial: Angie Cárdenas es una enamorada de las islas Baleares. La mujer de Alfonso Arús ha disfrutado por segundo fin de semana consecutivo de una lujosa escapada a las pitiusas.
La de Sant Pere de Ribes (Barcelona) ponía rumbo a Ibiza el pasado viernes, 2 de julio, nada más terminar el programa líder matinal que ella misma codirige en la Sexta. Lo hacía junto a su hermana, la también consanguínea del locutor Javier Cárdenas.
Una escapada muy sibarita
Y es que Nuria, quien en los últimos tiempos ha estado estrechamente vinculada a Esquerra Republicana, en el coqueto municipio del Garraf, se ha convertido en la mejor aliada de la subdirectora de Aruseros para disfrutar de la buena vida. Aprovechando que la televisiva ya tiene la pauta completa de vacunación contra la Covid-19, ambas se lo pasan en grande mientras se deleitan con las creaciones culinarias de los chefs más reconocidos de la isla blanca.
Amantes de la buena gastronomía, no cabe duda que las Cárdenas forman un tándem perfecto. Aunque, eso sí, de gustos muy refinados. Si hace dos semanas, las catalanas se alojaron en el exclusivo Hotel NOBU Ibiza Bay, ubicado en la paradisíaca playa de Talamanca, en esta ocasión lo han hecho en el Five Flowers Hotel & Spa de Formentera: un establecimiento de 5 estrellas, cuyo precio por noche no baja de los 500 euros.
De paladar fino
Cuanto a sus ágapes, las Cárdenas no escatiman en gastos: cócteles al más puro estilo Sexo en Nueva York, botellas de vino de más de 70 euros, carpaccios de gambas y muchísimos platillos de pescado crudo solo aptos para los paladares más exigentes. El Beso Beach Formentera, el BIBO de Dani García o el restaurante de su amigo Raza Zafra en la ibicenca y rocosa Cala Jondal, forman parte de sus paradas favoritas en su particular tour.
Y, ojo, porque por si fuera poco, Angie y Nuria también han tenido tiempo para las compras. La típica visita al mítico mercadillo de las Dalias no podía faltar. A su llegada a Barcelona, este par de socialités pusieron el broche de oro a su escapada, asistiendo al festival Vijazz en Vilafranca del Penedès. En definitiva, esto es un finde bien aprovechado y lo demás son tonterías. ¡Qué envidia!