Carmen Machi promociona el reestreno de su último y polémico espectáculo en 'El Hormiguero'

Las actrices Nathalie Poza, Carmen Machi y Carolina Yuste han visitado el plató de El Hormiguero para promocionar el reestreno de su obra de teatro, Prostitución. Un espectáculo teatral, musical y documental que recoge vivencias y experiencias de mujeres prostitutas. Dirigida por Andrés Lima, la función regresa a las Naves del Español del Matadero de Madrid adaptada a la situación epidemiológica actual.

Muy contentas por volver a los escenarios, las tres ganadoras de un premio Goya han relatado algunas de sus experiencias previas a la obra para documentarse, con la intención de "romper la máscara y el prejuicio hacia estas mujeres": "Estuvimos un tiempo largo de putas", ha bromeado Carmen Machi antes de revelar algunos de esos duros momentos.

Se han documentado a conciencia

Todos los personajes que aparecen en Prostitución son reales. Así lo afirman sus tres actrices protagonistas, quienes se documentaron para la obra charlando con prostitutas en pisos, casas, esquinas, clubes o polígonos. Precisamente en uno de estos últimos, donde la trata está a la orden del día, pudieron ver cómo una de estas mujeres entraba en un coche diferente cada siete minutos.

Una realidad que trataron de plasmar en su obra, para dar realismo a las vivencias. Eso sí, no todo lo que vieron lo han podido reproducir, como el descubrir que el momento en el que más clientes buscan sus servicios son "los lunes por la mañana, antes de ir a trabajar, con el traje y la corbata puestos", ha asegurado Nathalie Poza.

"Necesitan que se las escuche"

Su búsqueda de testigos empezó gracias a contactos como el programa de televisión Callejeros. "Se habrían el canal al saber que eramos nosotras. Son muy divertidas, en determinados momentos. Intentamos mantener su espíritu en el teatro", ha asegurado Carmen Machi.

Y es que "son mujeres que las tenemos al lado, pero no las miramos. Se pone más el foco en ellas que en los clientes que van. Necesitan que se las escuche", señalan las actrices. En ese sentido, las tres tienen claro que, en caso de hacer una segunda obra, será justamente en ese papel: harán de clientes.

Una obra que cumple su objetivo

Nathalie Poza ha contado una anécdota con la que ha tratado de demostrar que su objetivo básico se ha cumplido. En una ocasión, acudió al teatro el hijo de una prostituta que hacía muchos años que no hablaba con su madre. "La había estigmatizado", ha reconocido la intérprete.

Una vez finalizada la obra, el hombre se les acercó para darles las gracias porque, gracias a Prostitución, había decidido llamarla "para conocer su historia" y hacer las paces. Sin duda alguna, una de las mejores críticas a esta representación tan especial y reivindicativa.