Ana Obregón usa sus redes sociales para compartir cómo se siente. En los últimos meses sus seguidores la vieron destrozada por la muerte de su hijo, que era de lo que más hablaba, pero en las últimas semanas también aprovecha para posicionarse políticamente.
La última publicación de la bióloga ha sido al respecto del 8M, el día de la mujer, y las posibles manifestaciones que pueden darse en distintos puntos del país. Algunas han sido aprobadas, pero la ministra de Salud, Carolina Darias, subraya que “la situación actual no permite llevar a cabo manifestaciones”.
Primero golpes
Ante la controversia, la actriz ha dicho la suya. Asevera que "la ministra de igualdad [Irene Montero] ha convocado manifestaciones a pesar de la pandemia”, un llamamiento que no comparte.
“A veces las conexiones sinápticas de las neuronas con tanto lío nos van despacio", le espeta la bióloga antes de “refrescarle la memoria” a la podemita. En este sentido ofrece varios datos que le hacen sospechar que el año pasado se celebraron “en contra del criterio europeo del centro de control y prevención de enfermedades que desaconsejo celebrarlo” y que hacerlas este año supone un riesgo mayor. “Desde la OMS y los verdaderos expertos aconsejan evitar aglomeraciones", subraya.
El dardo final
Por si no quedaba claro el mensaje, la Obregón ha pasado a la crítica directa. "Todos queremos que esta pandemia acabe, pero nuestra ministra se empeña en celebrar esas manifestaciones para que empiece la cuarta ola antes de acabar la tercera, para que se contagien y mueran mujeres de todas las edades, para que los trabajadores se sigan arruinando. Por favor, no añadas más tumbas a la mala gestión del gobierno”.
Los reproches no se han quedado allí, y tras una recomendación le ha lanzado un tremendo zasca a Montero. “Este es mi humilde consejo, Irene. De una madre a otra madre, de una madre soltera que ha cuidado educado y trabajado sin tener que utilizar (Como dicen que has hecho tú) una niñera pagada con dinero público, a una madre que no ha tenido a Pablo para que le compre un chalet y tener un ministerio (qué suerte)”.
Mención a Aless
“Una madre que ha cogido de la mano a su hijo luchando contra el cáncer y no la ha soltado hasta el último momento”, añade en recuerdo a su hijo Aless Lequio. "Que no os engañen, elevad las palabras, no la voz. Es la lluvia la que hace crecer las flores no los truenos”, concluye.
Se salva de la quema la ministra de Sanidad que no va asistir. Está con ella, “porque no asistir no significa que no seamos feministas, significa que queremos evitar más muertes. Y eso enaltece a la mujer”.