La actriz estadounidense Demi Moore ha reaparecido después de mucho tiempo para cumplir su sueño de la adolescencia: desfilar como modelo. Y no lo ha hecho en un sitio cualquiera, dado que ha formado parte del elenco de modelos que han presentado la nueva colección de Kim Jones para la firma italiana Fendi en la Semana de la Moda de París.
Junto a Naomi Campbell, Kate Moos, su hija Lila, Cara Delevigne y Bella Hadid, la actriz captó todas las miradas en uno de los eventos más esperados del año. Y es que la exmujer de Bruce Willis y Ashton Kutcher apareció completamente cambiada a como la recordábamos: se le ha ido de las manos el bisturí.
La nueva cara de Demi Moore
"Cumpliendo un sueño adolescente ... ¡Gracias Kim Jones por invitarme a abrir el show de Fendi SS21 ¡Felicidades por un debut tan hermoso y mágico!", ha escrito la protagonista de Ghost en sus redes sociales. Una reaparición a la vida pública que ha dejado impactados a todos los que la han visto.
A sus 58 años, Demi Moore se resiste a envejecer y parece enganchada a las operaciones estéticas, aunque la última no ha dejado a nadie indiferente. Sí es cierto que la zona de los ojos recuerdan a esa mirada que encandiló al público cuando se cruzó con los ojos de Patrick Swayze, pero muchos han comparado la zona de la boca con la de un Predator, los enemigos de Alien en la saga iniciada por el cineasta Ridley Scott.
La nueva cara de Demi Moore / TWITTER
La reflexión de Ana Milán
El impactante cambio físico ha desatado tantos comentarios como críticas, a los que Demi permanece ajena. Y es que parece haber seguido los pasos de algunas de sus compañeras, como Melanie Griffith, Uma Thurman o Renée Zellweger: la frente sin una sola arruga, la nariz visiblemente más redondeada, los ojos sin apenas expresividad... y unos pómulos y una boca que han cambiado por completo la expresión de su cara.
Vistas las reacciones en las redes sociales, donde la gran mayoría ha apostado por burlarse de la actriz, Ana Milán, compañera de profesión, ha querido lanzar una reflexión a los críticos: "Quizá lo que toca pensar es porqué una mujer de una belleza tan excepcional como Demi Moore prefiere verse así a verse envejecer. Quizá, como sociedad, estamos haciendo algo mal. Quizá toca reírse menos y pensar más".