Mahi y Rafa se proclamaron hace unas semanas como los ganadores de La casa fuerte 2. Un concurso que se les hizo más difícil de lo que aparentaron en pantalla, y es que por culpa de las cámaras que los grababan en todo momento, no pudieron intimar.
"Hemos perdido la costumbre del sexo y ahora aguantamos muy poco mientras hacemos el amor", ha confesado Mahi al ser preguntada por Jorge Javier Vázquez en el plató de Sálvame Deluxe. Un impedimento que, ahora, han solucionado por la vía rápida: "Nos metemos mano a todas horas".
Rafa y Mahi, más salidos que nunca
Llegada la hora golfa en Telecinco, los colaboradores de Sálvame han llorado de risa con la entrevista a los ganadores de la última edición de La casa fuerte. Y es que, semanas después de finalizar el reality, la pareja se ha mostrado más salida que nunca.
Mahi ha confesado tener "varios vibradores con todo tipo de formas", incluso hay uno con nombre: Luis. Lejos de estar celoso, Rafa aseguraba lo difícil que ha sido no poder intimar con su pareja, con la que ahora se desahoga a todas horas... y no descarta usar alguno de los juguetes de su novia.
La puntilla de Jorge Javier Vázquez
Con esta confesión, la extravagante concursante ha revelado que "un amigo muy cachondo me regaló uno que va con mando y se agarra como una ventosa, que no se lo he enseñado a Rafa porque es muy grande". Un comentario que ha animado al presentador, Jorge Javier, que ha puesto su puntilla al tema al decir que "hay gente muy pesada que tarda mucho en correrse, por lo que me han dicho".
Un comentario que Mahi ha respondido al afirmar que "yo lo he fingido para que no se flipe la siguiente vez". Sin embargo, Rafa se ha mostrado más romántico y se ha limitado a contar que se conocieron por Tinder y que, como todos los universitarios de Granada, quedaron en la plaza Einstein: "Hasta la tercera cita no me di un pico con Mahi, pero en la primera cita ya llevaba preservativos. Los por si acaso", ha confesado.
La confesión de Rafa y su mal trago
Del mismo modo, Rafa ha admitido por primera vez lo mal que lo pasó con su participación en La casa fuerte: "He perdido 12 kilos por culpa de la ansiedad que vivía en el programa. Vomitaba todas las mañanas". Una experiencia que han entendido en el plató, pero que no han querido continuar.
Por eso, han vuelto al tema del sexo hasta animar al ganador del reality. Además del tema de los condones, lo único que ha admitido es que no les gusta "mantener sexo delante de nuestra perra. La encerramos en el lavabo", porque se queda mirando a sus dueños que, nerviosos, pierden la libido. Eso sí, cuando termina, Rafa asegura que se queda "como una cucaracha cuando le echas el flish".