Melyssa Pinto ha puesto punto final a su relación con Tom Brusse en directo. La expareja iniciaba su aventura en la segunda edición de La isla de las tentaciones con el objetivo de superar los problemas de celos que arrastraban.
Tras ocho meses de relación, el noviazgo ha terminado como el rosario de la aurora en una hoguera de confrontación en la que la catalana ha estallado en contra de Tom.
Melyssa al límite
No cabe duda que Melyssa ha sido la concursante que más ha sufrido a lo largo del reality. Un hecho por el que ha llorado desconsoladamente más de la mitad de los días. Las imágenes en las que se veía a su novio mientras besaba a Sandra, una de las tentadoras, la dejaron tocada y hundida.
Con el paso de las semanas, el agotamiento mental de Pinto llegó a tal punto que, durante la cuarta hoguera de las chicas, optó por no ver las imágenes de Tom en compañía de su amante. "Esta situación me está costando la salud" aseguró la influencer ante la presentadora. Y es que Melyssa ya había tenido suficiente; sin más dilación retaba al empresario a una hoguera de confrontación. Un cara a cara que podía traerle consecuencias fatales.
"No era feliz"
Tom aceptaba. Cabizbajo y sin levantar la mirada, el de Marrakech aguantaba el chaparrón. Mientras que Melyssa disparaba a bocajarro un aluvión de preguntas, acusaciones y reproches, Tom respondía a base de monosílabos.
Lejos de justificarse, Brusse echaba balones fuera: culpaba a la catalana y a sus celos de la situación en la que había derivado su relación. "No era feliz, no me dejabas ser yo" o "cada tres días me enviabas a la mierda" son tan solo algunas de las perlitas que soltó por la boca el mismo concursante que, días antes de entrar al reality, le había pedido matrimonio.
"Para mí te has muerto, Tom"
Acto seguido, la dirección del programa ofrecía a la expareja las imágenes del primer edredoning de esta edición, que tenía como protagonista al empresario y a Sandra. Ahora sí, la gota que colmó el vaso. Melyssa volvía a la carga y no se cortaba un pelo. Con una actitud fuerte, muy reforzada, absolutamente diferente a la que había mostrado hasta entonces en la casa, rompía con Tom.
"Para mí te has muerto Tom Brusse. No vuelvas a buscarme, cerdo de mierda". La concursante decidía poner rumbo a España. "Me quiero ir con mi familia. Quiero resguardarme con las personas que sí me quieren de verdad. Me voy con la cabeza alta y muy orgullosa de mí" sentenciaba, la catalana.