Mila Ximénez, a sus 68 años, está viviendo una auténtica pesadilla. Y es que los médicos le han diagnosticado un cáncer en el pulmón. Una enfermedad que la tertuliana comunicó a sus compañeros, en pleno directo, el pasado jueves 18 de junio.
Desde entonces, la colaboradora de Mediaset se ha refugiado en los suyos, especialmente en sus hermanos Manolo y Concha, quienes se han convertido en su principal apoyo ahora que ya ha empezado el tratamiento contra dicha enfermedad.
Mila Ximénez habla del cáncer
Si hace unos días, coincidiendo con su primera aparición pública tras anunciar que padece cáncer, Mila Ximénez decía que "no he hecho exclusivas ni nada", ahora la de Sálvame se lo ha pensado mejor y se ha animado a hacer una. Lo ha hecho para la revista Lecturas, donde aparece en portada hablando del durísimo golpe de salud que le ha deparado la vida. Una entrevista en profundidad que coincide con el inicio del tratamiento de quimioterapia de Mila Ximénez contra el cáncer.
"Siento un dolor insoportable, pero no quiero medicarme. Quiero saber lo que es el dolor de un cáncer”, asegura la periodista nacida en Sevilla en relación a la dolencia que padece. Además, confiesa que no está preocupada por si se le cae el pelo, por culpa de las sesiones de quimioterapia. Un tratamiento que está previsto que dure aproximadamente unos seis meses, tal y como ella misma explicó en Sálvame. "Esto es una guerra entre el cáncer y yo. Tengo cojones para él y cinco más como él", asegura, muy contundente, Mila Ximénez.
Los principales apoyos de Mila
Además de sus hermanos y de su hija Alba, quien está previsto que viaje hasta Madrid en los próximos días, Mila Ximénez también se apoya en grandes amigos y compañeros suyos como Jorge Javier Vázquez y Terelu Campos, entre otros. "Jorge es el amor de mi vida, es mi niño. Lo cuido tanto... No quiero que sufra y cuando le veo llorar me muero de pena", confiesa la andaluza en relación al presentador de Mediaset. Además, de la hija de María Teresa Campos, con quien ha protagonizado tremendas broncas en el plató de Sálvame, dice: "Hablo con ella cada hora. Me apoya mucho y me dice cómo tengo que reaccionar ante la quimioterapia".
Unos apoyos que se suman al que ha encontrado, atención porque es fuerte, en Noemí Salazar, la que fuera su compañera dentro de la casa de GH VIP 7. Y es que la tertuliana de Sálvame y la de los Gipsy Kings quedan a menudo para ir a rezar a la iglesia evangélica. "Pido a Dios que me ayude y le doy las gracias por no tocar a mi familia. Conmigo, lo que quiera", sentencia Mila, quien asegura que el cáncer la ha acercado a la religión y ahora es mucho más creyente de lo que era antes.