Duro revés el que le ha deparado la vida a Mila Ximénez, tras superar un duro encierro por el coronavirus y volver al trabajo, algo que le hacía mucha ilusión. Y es que los médicos le han diagnosticado un cáncer de pulmón.
Una dura enfermedad a la que la televisiva se enfronta con mucha fuerza, pero también con mucho miedo. Y es que si hay algo que le da auténtico pavor es el hecho de hacer quimioterapia para superar la delicada enfermedad que padece.
Mila Ximénez desvela que padece cáncer de pulmón / EP
La última comida de Mila Ximénez
El pasado jueves 18 de junio Mila Ximénez, tras unos días encerrada en su casa, salió al exterior para disfrutar de un paseo al aire libre con sus hermanos Manolo y Concha, quienes se han trasladado hasta Madrid para hacerle compañía en estos duros momentos. Una jornada en la que los tres disfrutaron de una caminata mañanera. Acto seguido, se desplazaron hasta el restaurante El Qüenco de Pepa, uno de los favoritos de Mila Ximénez, ubicado en la zona de Chamartín, donde la colaboradora vive ahora tras mudarse a un lujoso piso el pasado febrero.
Una comida que sirvió a la tertuliana para coger toda la fuerza que necesita para afrontar el duro tratamiento que le viene ahora. Y es que el viernes 19 de junio empieza la lucha de la periodista de Sevilla contra el cáncer de pulmón que padece. Lo hará sometiéndose a una prueba para ver el movimiento que tienen las células cancerígenas, "que no están muy localizadas". Así lo contó ella misma el pasado martes 16 de junio, en una conexión telefónica que hizo en directo con el programa Sálvame. "Tengo un cáncer pero no quiero que me miren como una persona enferma", añadió.
Las últimas palabras de Mila Ximénez
Antes de empezar con el duro tratamiento, la colaboradora de Mediaset ha respondido muy amablemente a los medios de comunicación, quienes se han interesado por su estado de salud. Lo hizo el pasado jueves 18 de junio, nada más salir del restaurante al que fue a comer con sus hermanos. Ocultando su rostro bajo unas gafas negras y una mascarilla quirúrgica Mila confesó emocionada y la voz entre cortada: "A partir de mañana vendrá lo gordo y me quedaré en casa. No voy a salir mucho, pero tampoco me voy a esconder de nada. Solamente necesito mi espacio".
Un tratamiento, con una duración aproximada de unos seis meses, en el que Mila recibirá tanto sesiones de quimioterapia como inmunoterapia, para estimular las defensas naturales del cuerpo contra el cáncer de pulmón que padece. "Tengo mucho miedo, sí. Tengo mucho miedo pero vamos a ver qué pasa", dijo visiblemente preocupada por lo que le viene encima. Una batalla que afrontará junto a sus hermanos, amigos y su hija Alba, quien estos días también se trasladará hasta Madrid para estar al lado de su madre. Eso sí, los nietos de la periodista se quedarán en Ámsterdam, donde residen, puesto que no saben nada de la enfermedad de la colaboradora de Sálvame. "Ya los veré en Marbella", ha asegurado Ximénez. Y es que la tertuliana, si se encuentra con fuerzas, tiene previsto pasar el verano en una casa de alquiler en la Costa del Sol junto a su familia. Además, si no se complica el asunto, en septiembre tiene pensado regresar a su puesto de trabajo.