Herramientas de iOS y Android para no abusar de la tecnología durante la reclusión

El confinamiento en el siglo XXI se lleva mejor gracias a la tecnología. Videollamadas, cursos online, teletrabajo, plataformas de películas y series… Una larga lista de opciones de entretenimiento llena el excesivo tiempo de ocio que tiene la población en este momento, sin embargo, hay que tener precauciones. Los expertos ya han asegurado que podría desembocar en una adicción a las pantallas con secuelas que perdurarían una vez levantado el estado de alarma.

Por ello, racionarse el uso de la tecnología es necesario también ahora, en pleno confinamiento. Alternativas como leer libros en papel, jugar a juegos de mesa con la familia o cocinar son buenas opciones para desintoxicarse durante un rato de las pantallas y darle un descanso a la vista y a la mente, los dos grandes perjudicados de este abuso tecnológico. Además, también se puede obtener una ayuda extra para evitar un uso excesivo. Por ejemplo, iOS y Android tienen dos herramientas muy útiles.

Bienestar digital de Android

Los smartphones con Android 10 tienen de forma nativa esta opción en el menú Ajustes. Bienestar digital busca precisamente concienciar a los usuarios de la cantidad de horas que se usa el smartphone, para valorar dónde se invierte más tiempo e incluso establecerse límites si es necesario. Se pueden obtener datos como la cantidad de veces que se ha desbloqueado el móvil, el tiempo empleado en cada app o las aplicaciones que más notificaciones han enviado al usuario.

Además, también se puede fijar un Modo descanso, para activar una escala de grises o un modo no molestar. Recientemente, se ha estrenado también la función Focus, dentro del Bienestar digital de Google, que permite a los usuarios establecer qué apps no se desean utilizar durante un período de tiempo determinado (5, 15 o 30 minutos). Muy útil cuando se va a entrar a una reunión o la mañana está siendo algo improductiva por culpa de las constantes consultas del móvil.

Tiempo de uso de iOS

Una herramienta muy similar la tienen también los iPhone y iPad. Está disponible a partir de iOS 12 y promueve también un sano más razonable de la tecnología. Tiene muchas similitudes con el Bienestar digital de Android, aunque también incorpora sus propios datos. Es bastante completa y permite, por ejemplo, conocer el promedio de uso diario, el porcentaje de crecimiento o descenso respecto a la anterior semana o incluso el tiempo empleado en cada app.

Además, permite establecer un tiempo de inactividad en el que solo estarán disponibles apps específicas y las llamadas de teléfono, así como limitar el uso de ciertas aplicaciones, incluso los contactos que te pueden llamar, los contenidos que se desean bloquear siempre o las apps que tienen continuamente carta blanca para funcionar. También divide el uso de aplicaciones por temáticas (redes sociales, productividad y otros) para que el usuario pueda saber de forma rápida dónde gasta su tiempo.

Dispositivos con el sistema operativo de Apple / Tran Mau Tri Tam EN PIXABAY

Control imprescindible

El abuso de la tecnología ya era un tema de preocupación antes de la pandemia y ahora, en estas circunstancias en las que se busca por encima de todo permanecer en casa, se está mostrando una mayor permisividad en este tema. No es nuevo y, aunque la tecnología tiene beneficios enormes, hay que vigilar su uso responsable. Una muestra se encuentra en los resultados del Estudio Uso y abuso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación por adolescentes.

Elaborado en 2018 y tomando como muestra a 2.341 adolescentes de entre 15 y 16 años de la Ciudad de Madrid, se concluyó que solo el 32% hace un uso responsable de internet. El 31.5% muestra señales de riesgo, el 23.3% hace un uso abusivo y el 13.2% de los jóvenes muestra una dependencia a internet. Este es solo un ejemplo de la importancia de hacer uso de las herramientas que los propios dispositivos ponen al servicio de la comunidad, para valorar de forma individual si se está haciendo un uso excesivo y establecer límites lógicos para que la tecnología sea siempre un aliado y no se pueda convertir en un enemigo.