En la época del franquismo era común que los nombres de los pueblos en Cataluña se modificaran al castellano bajo imposición y sin pretexto alguno. ¿Ejemplos? Municipios como Castell d'Aro que pasó a llamarse Castillo de Aro o Móra d'Ebre que pasó a llamarse Mora de Ebro. Móra la Nova transmutó en Mora la Nueva. San Quírico Safaja, Aliñá...
Después de la caída de la dictadura, en 1978, la mayoría de estos topónimos o nombres castellanizados recuperaron su nombre original en casi todas partes. La clave es ese "casi". Y es que existe una excepción aún vigente: Cabacés, en Tarragona.
Este municipio de la comarca del Priorat aún tiene su nombre castellanizado. Aunque el nombre se ajusta a las normas ortográficas del castellano en lugar del catalán, Cabacés sigue siendo el nombre oficial, a pesar de los esfuerzos para que el pueblo recupere su nombre original en catalán, Cabassers.
El topónimo Cabacés se acentúa siguiendo las reglas ortográficas del castellano desde 1738, y su primer registro se encuentra en un documento de 1742. Sin embargo, en 1868, el Instituto Geográfico y Estadístico estableció Cabacés como el nombre oficial, a pesar de que en ocasiones se escribía como Cabasés en un intento de preservar la pronunciación catalana. La adopción completa de Cabacés no ocurrió hasta el período del franquismo, que se impuso tras la Guerra Civil. Esto se dio a pesar de que la Generalitat ya lo había oficializado en 1933.
Aunque Cabacés es el nombre oficial, el Institut d'Estudis Catalans defiende y promueve el uso de Cabassers como forma correcta. Esta versión en catalán busca contrarrestar la influencia de la castellanización que persiste en el nombre oficial. En este sentido, existe una lista oficial de nombres de pueblos en Cataluña, donde se busca establecer los topónimos originales. Entre ellos, está incluido Cabassers.
Otros nombres curiosos de pueblos catalanes
Repartidos por Cataluña encontramos otros pueblos con nombres curiosos, aunque por motivos diferentes a los de Cabassers. El más clásico es Espolla, municipio de la comarca del Alt Empordà cuyo producto principal no es lo que crees, sino sus vinos. También está Porrera, del Priorat. Además de tener un nombre curioso (que convierte a sus habitantes en porreranos), también tiene fama vinícola.
Aunque nuestro nombre curioso preferido es La Pera, municipio del Baix Empordà cuyos habitantes, los perencos o perencas, habrán oído mil veces eso de que "vuestro pueblo es la pera limonera".
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