Adiós a las tarjetas en cajeros automáticos: así sacarás dinero a partir de ahora en Cataluña

Acercarse un cajero automático, sacar la tarjeta de la cartera, insertarla en la ranura designada y comenzar las operaciones tras ingresar el código correspondiente ha sido la rutina de décadas pasadas. Sin embargo, una revolución está en marcha y transformará este habitual modus operandi tanto en Cataluña como en el resto de España.

En tiempos anteriores, las personas solían recurrir a los cajeros para retirar efectivo que luego empleaban en sus compras. No obstante, cada vez más ciudadanos prefieren pagar cotidianamente con dinero de plástico.

Esta tendencia ha llevado a una disminución en la cantidad de transacciones y a una reducción en el número de terminales. El año 2008, durante la crisis inmobiliaria, marcó el pico de cajeros automáticos con 61.714 máquinas. Actualmente, su número se encuentra por debajo de las 45.000.

Esta disminución ha sido resultado de diversos factores. Uno de ellos es el cierre de sucursales bancarias, cada una con al menos un cajero. Además, la digitalización del sector financiero y la reducción de personal para reducir gastos también han contribuido.

Vale la pena señalar que la producción de tarjetas de crédito o débito implica costes. Así como los billetes de avión tienen un sustituto digital, las tarjetas también están siendo reemplazadas para realizar retiros en cajeros automáticos.

¿Qué tecnología reemplazará a las tarjetas de crédito?

Similar a cómo los billetes de avión ahora pueden ser almacenados en teléfonos móviles en lugar de papel, los cajeros automáticos pronto podrán usarse sin necesidad de insertar la tarjeta física.

Cada vez más cajeros automáticos de entidades financieras están incorporando la función "contactless". Aunque todavía se requiere la tarjeta en este punto, muchos bancos han actualizado esta función para hacerla compatible con la tecnología NFC.

¿Cómo funciona esta tecnología?

La tecnología NFC (Near Field Communication) se basa en el sistema RFID (Radio Frequency Identification), permitiendo la transferencia de datos entre dispositivos a corta distancia, unos pocos centímetros.

En otras palabras, es una tecnología inalámbrica de corto alcance que cifra la información transmitida, asegurando la confidencialidad de los datos.

En consecuencia, los dispositivos deben estar cercanos, al igual que cuando se paga con un teléfono móvil en un punto de venta.

El proceso para retirar efectivo de un cajero automático con esta tecnología implica: abrir la aplicación de la tarjeta (del banco, Google Wallet, etc.), activar el NFC en la configuración del teléfono, acercar el dispositivo móvil al "contactless" del cajero y mantenerlo unos segundos. Luego, ingresar el PIN y operar.

En resumen, el uso de esta tecnología es similar al de una tarjeta. Si el teléfono móvil se pierde o es robado, se debe cancelar las tarjetas asociadas antes de que sea tarde, tal como se haría con una billetera de tarjetas físicas.